La pequeña tiene apenas dos años y es la persona más joven que ha sido criogenizada. Murió en enero.
Los papás de una nena tailandesa de dos años decidieron congelarla hasta que se encuentre una cura contra cáncer. Matheryn Naovaratpong murió el 8 de enero de un tumor cerebral.
Los restos de la niña están en la sede de Alcor, una empresa de criogenización con sede en Arizona congelados a 196 grados bajo cero. Es la personas más joven en ser sometida a este procedimiento.
Los médicos de Bangkok diagnosticaron a Matheryn en abril de 2014 ependimoblastoma, un tumor de 11 centímetros en el lado izquierdo de su cerebro.
A partir de ese momento, comenzó un largo camino que incluyó 12 operaciones de cirugía cerebral, 20 tratamientos de quimioterapia y 20 sesiones de radioterapia. Finalmente, en enero sus padres la desconectaron.