La docente de Olimpíadas Especiales, Ana Oyarzabal, dijo que  definitivamente es una forma de vida trabajar con personas con discapacidad e incluirlas a través del deporte. “Para nosotros ya es una forma de vida, todos los días estamos pensando en proyectos para favorecer el desarrollo de las personas con discapacidad”.

Con motivo de los festejos se realizarán diferentes acciones que brinden oportunidades de inclusión a las personas con discapacidad, por medio de actividades deportivas, recreativas y expresivas.

“Todas estas actividades se pueden realizar gracias al aporte del trabajo de voluntarios, el apoyo de las familias y comunidad universitaria que cotidianamente sostienen las acciones que se desarrollan en pos de mejorar la calidad de vida de los participantes”, agregó Oyarzabal. 

Destacó que el proceso de inclusión que se lleva a cabo, se considera como una oportunidad de formación, crecimiento, de desarrollo de valores como amor, respeto y solidaridad. "Se relaciona dicho proceso con la aceptación de todos sin discriminación, brindando una formación de calidad para todos y sirviendo de enlace entre la educación especial y la educación convencional para consolidar procesos de inclusión a través de prácticas integradoras".

“Los valores de trabajo en equipo, cooperación, respeto, amor, solidaridad, apertura al cambio y la defensa al derecho a la educación muestran la fortaleza de este proceso incluyente y los supuestos para actuar en pro de la integración”, enfatizó.


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