Un terremoto de magnitud 7,8 en la escala Richter arrasó el sábado por la noche gran parte de Ecuador y ha provocado una tragedia aún impredecible. Al menos 500 personas han muerto.

La riocuartense Florencia Pagliarone reside en Quito, la capital del país fuertemente afectado por el movimiento sísmico. La joven contó, en La Tarde del Limón, como se vive por estas horas en Ecuador.

 “Ecuador está sobre una falla, por lo que los edificios tienen una construcción antisísmica y, ante un sismo, oscilan de lado a lado para evitar el derrumbe”, afirmó.

Afirmó que cuando ocurrió el terremoto la gente no sabía lo que sucedía, “las comunicaciones habían colapsado, solo funcionaba el Whatsapp, se evacuaron todos los edificios, el epicentro estuvo a 5 horas de Quito”, dijo Pagliarone.

“No hay cifras oficiales sobre el número de desaparecidos y hay reclamos de familiares que no tienen contacto”. Afirmó que la cifra tentativa de desaparecidos sería de 1700, varios turistas entre ellos.

Pagliarone dijo que están recibiendo ayuda de varios países. En Córdoba se está realizando una campaña de donaciones para los damnificados.

 

Informe16/Lv16.com