Racing no para. Gana, gusta, golea, y sigue goleando. Esta noche lo sufrió Deportivo Cali, que viajó a Avellaneda con el deseo de sumar al menos un punto para mantenerse con vida en la pelea por la clasificación a los octavos de final de la Copa Libertadores en un Grupo que también comparte con Boca. Y emprendió el viaje de vuelta a Colombia con cuatro goles de lastre. Impresionante eficacia la del conjunto de Facundo Sava.

El técnico había decidido poner de entrada en la cancha a sus mejores delanteros en un tridente ofensivo que pocos pueden presentar: Diego Milito, Lisandro López y Gustavo Bou. Imaginar una goleada a favor de la Academia con ellos más Oscar Romero en el once inicial era previsible, sin embargo la nota la da la situación que quien abrió el marcador fue el defensor Leandro Grimi.
 Recién después llegó el lucimiento. Licha López, de gran nivel, estiró la diferencia en la chapa antes de que el paraguayo Romero metiera el tercero para desatar la fiesta en el Cilindro. Ni el descuento colombiano hizo imaginar una remontada cafetera. el tanto de Roa apenas sirvió para devolverle la moral a un Cali que necesitaba sumar en condición de visitante si quería mantener intacta la ilsuión.

Si bien durante el complemento obligaron al lucimiento de Sebastián Saja, la chapa se modificó tras le ingreso de Roger Martínez, quien anotó el cuarto de los hombres de celeste esta noche (blancquiclestes habitualmente). Únicamente sobre la hora Pérez decoró el marcador al poner el 2-4 definitivo.

Con este resultado, el Grupo 3 quedó de la siguiente manera: Racing con 8 puntos, Boca con 6, Bolívar con 4 y Deportivo Cali con apenas 2.