Estudiantes y Atenas no se sacaron ventajas en el choque que se disputó en cancha del celeste, ante una muy buena concurrencia. El albo dejó una mejor imágen y mereció algo más
Intenso, apretado, cerrado como todo clásico el que disputaron Estudiantes y Atenas. Finalmente el encuentro que se disputó ante una muy buen marco de público finalizó igualado en cero. El punto le permite a Estudiantes quedar como único líder de la zona 12 y para Atenas el premio de un punto es mezquino por lo que desplegó en el terreno de juego y no le permite crecer lo suficiente en la tabla.
En el primer tiempo fue Atenas el que impuso condiciones en el juego, ganó la mitad de cancha y se plantó con mucha autoridad. Lo jugó como se deben jugar los clásicos. Feldman recuperaba con rapidez, Torres y Oyola cumplieron por afuera, Cuello se sumaba con criterio al ataque de Tambussi, muy participativo y Hongn que fue de lo mejor del encuentro. Le faltó punch, pimienta en los últimos metros, Atenas carece de "gol" y lo paga muy caro incluso en los partidos que domina como fue en los primeros 45'. Por el lado de Estudiantes, muy poco para resaltar. La participación de Peralta ante un remate de Oyola fue lo mejor de un equipo que lució desconectado. El empate del primer tiempo dejó un sabor amargo a Atenas porque no pudo plasmar su superioridad en el marcador.
En los segundo 45' el ritmo del encuentro fue distinto. Estudiantes emparejó las acciones, y casi abre el marcador antes del minuto del complemento cuando el remate de Colazo sale apenas desviado. Puñet fue salida permanente y Estudiantes conseguía progresar por su sector. En un marco de paridad en el complementose destacan las ganas de un Atenas herido y necesitado contra un Estudiantes que transita esta parte del torneo sabiendo que conseguirá la clasificación en las próximas fechas y tal vez esa tranquilidad haya influido y cómo afrontó el partido.
El clásico de Río Cuarto una vez más tuvo la respuesta popular, tribunas llenas, mucho colorido, el "folklore" bien entendido y todo acompañado por un buen comportamiento.