Seis de los ocho legisladores nacionales anotados en la carrera presidencial declararon un patrimonio superior al millón de pesos. Sergio Massa, el mejor posicionado en las encuestas, es también el que más bienes consignó: $ 2.768.320. Julio Cobos vio crecer sus bienes en un 111% y alcanzó $ 1.020.413, aunque anoche insistió por Twitter en que el incremento responde a la actualización de la tasa fiscal de los inmuebles en Mendoza. Elisa Carrió es, a la vez, la que declaró un patrimonio más bajo, de $ 192.577, y la que sufrió mayores pérdidas durante el año pasado, del 49% respecto del anterior.



La información surge de las declaraciones juradas que dio a conocer anteayer la Oficina Anticorrupción (OA), junto con la difusión del detalle de los bienes de la presidenta Cristina Kirchner y de los restantes los funcionarios del Gobierno. Para calcular el monto total de los patrimonios, LA NACION sumó el valor de todos los bienes declarados, entre los que se incluyen los créditos, y restó el valor de las deudas.

De acuerdo con esos documentos, en los que se tiene en cuenta el valor fiscal de los bienes y no el de mercado, Hermes Binner es el otro legislador/candidato cuyo patrimonio no supera el millón de pesos: declaró bienes por $ 672.507. Detrás de Massa, que incrementó su patrimonio en un 80% durante 2013, se ubican Ernesto Sanz, con $ 2.636.641, y una evolución favorable del 44% respecto del año anterior; Fernando "Pino" Solanas, con $ 2.492.256 de patrimonio, y un crecimiento del 12%; Aníbal Fernández, con $ 1.716.351, lo que significó un 23% menos que 2013, y Julián Domínguez, con $ 1.652.223 y un 24% de crecimiento. Después vienen Cobos, Binner y Carrió.

Massa fue, junto con el ex vicepresidente, uno de los pocos que no declaró deudas. De hecho, sin tener en cuenta las deudas, Solanas lo superaría en patrimonio, con $ 3.271.553 en bienes. Pero el senador por la ciudad de Buenos Aires declaró que debe $ 779.297, la mayor parte a Cinesur SA, una empresa de su propiedad. El patrimonio del jefe del Frente Renovador se compone, entre otras cosas, de una casa de 525 m2 en Tigre, adquirida en 1999 y con un valor declarado de $ 1.613.655; un VW Tiguan modelo 2011; depósitos bancarios por $ 128.510; "bienes del hogar" por $ 116.352, y medio millón de pesos en efectivo. La mayor parte de su evolución patrimonial en 2013 responde, según consignó Massa, a la "diferencia de valuación de los mismos bienes al inicio y al final del año", una categoría prevista en los documentos oficiales de la OA.

Otro que declaró un patrimonio abultado fue Sanz. El senador radical dijo que tiene, entre otras cosas, una casa de 350 m2 en San Rafael (Mendoza), dos terrenos en la misma ciudad obtenidos de herencia, dos campos en Cuadro Benegas (Mendoza) y una propiedad de 300 m2 en Villa La Angostura. Y declaró un VW Vento 0 km, por $ 185.900.

En la evolución patrimonial de Fernández, el segundo que más perdió en 2013, fue determinante su separación matrimonial. El senador debió desprenderse de cuatro departamentos, una casa, un local y dos autos. Eso sí, se dio un gusto y se compró un BMW 328 I 0 km, declarado por $ 432.400.

Carrió fue, después de Solanas, la que más deudas declaró, por un total de $ 428.571. La deuda más grande la tiene con Urbaland Argentina SA, a la que le compró su propiedad más valiosa: un terreno de 4240 m2, en Exaltación de la Cruz, al que le hizo mejoras por $ 372.259.

Domínguez, en tanto, dijo que posee una casa y dos terrenos en Chacabuco. Uno de ellos, de 335 m2, lo adquirió el año pasado, y lo declaró por un valor de $ 175.000.

Una curiosidad. En un apartado de la declaración jurada, los legisladores debían poner cuántas horas semanales dedicaban a su trabajo en el Congreso. Cobos, Solanas y Massa dejaron el casillero en blanco. Fernández y Sanz consignaron 40 horas por semana, Carrió 48, Binner 49 y Domínguez, 50. (La Nación)