Recuerdo la cobertura para LV 16 y Fm Ranquel, esto fue el 3 de noviembre de 1995, había pedido al director de la radio el día libre porque quería festejar el cumple de abuelo Miguel en Moldes y dos días posteriores Giuliano mi hijo mayor cumplía años.

Tenía todo preparado para viajar a Moldes cuando un oyente me llama desde Berrotarán, habían escuchado un ruido que parecía un sismo fuerte, prendo la radio y Alberto Etulain ya decía de una fuerte explosión en Río Tercero.

Rápidamente dejé a mi familia en casa y postergué el viaje a Moldes para la tarde. Llegué a la radio y el director me comunicó que ya había enviado dos periodistas al lugar, uno en avión y otro en el móvil de la radio, le pedí permiso para sacar el móvil de FM que era el que usaba siempre y salí hacia Río Tercero.

Lo prímero que me sorprendió al llegar es que todos los vecinos disparaban de la ciudad como si fueran perseguidos por una fiera indestructible, se veían en el camino familias enteras acampando cerca de Almafuerte, mientras se escuchaban los ruidos de las explosiones, cuando ingrese por la avenida Savio la situación era de una ciudad devastada, solamente policías y bomberos que no te dejaban pasar para llegar al barrio de "las Violetas" que está pegado a la fabrica.
Tuve la suerte que en unos de los controles estaban los bomberos de Río Cuarto que me permitieron pasar y llegar al lugar de las explosiones, a partir de ahí las imágenes que tengo es de un barrio totalmente destruido, no estaban los propietarios y las casas habían sido alcanzadas por las esquirlas debido a las explosiones. Relataba los hechos cuando me encuentro con un sacerdote a pocos metros de la fábrica en la esquina del barrio, comenzamos la entrevista y de pronto se escucha una explosión y el teléfono celular fue a parar a la casa vecina, mi compañero Marcelo Arbillaga no sabía qué decir, porque no se había cortado la línea y cuando me levanté, agarré el teléfono y me comuniqué nuevamente para aliviar la angustia de mi compañero y mi señora que estaba escuchando la radio.

Quedó la imagen en la revista Gente del móvil de FM en el medio del barrio rodeado de las bombas explotadas. La sucesión de explosiones dejó siete muertos, cientos de heridos, la planta industrial averiada y graves destrozos en varios barrios. La impresión en Río Tercero, antes y ahora, fue que pudo haber sido mucho peor: miles de bombas de guerra estallaron y volaron por el aire, repartiendo esquirlas por media ciudad.

El caso llega con cuatro procesados, todos militares retirados, imputados de “estrago doloso por muerte de personas”. Dos eran directivos de la estatal Fabricaciones Militares: Carlos Franke, director de Producción, y Edberto González de la Vega, director de Coordinación Empresaria. Mientras, Jorge Cornejo Torino era director de la planta en Río Tercero y Marcelo Gatto el jefe del área de la que dependían los 
polvorines.

El expresidente Carlos Menem y el exjefe del Ejército, Martín Balza, fueron procesados en su momento, pero resultaron sobreseídos en etapas anteriores de la causa. El argumento judicial es que no había pruebas suficientes para sostener la sospecha sobre ambos. Fiscales y querellantes recurrieron esos fallos ante la Cámara Nacional de Casación Penal.

El auto de elevación suscripto por el juez federal de Río Cuarto, Carlos Ochoa, sostiene que las explosiones fueron provocadas “por intermedio de persona o personas cuya identidad a la fecha aún se desconoce, de manera intencional, programada y organizada” (...) “con el objeto de ocultar un faltante de proyectiles, municiones o explosivos”, que las pericias evidenciaron. La tesis es que lo hicieron para borrar pruebas de las ventas ilegales de armamento.

Lo lamentable de esta tragedia es que pasaron casi 20 años y no hay justicia porque no se sabe qué pasó, las explosiones fueron por un accidente o fueron provocadas intencionalmente, además no hay responsables políticos de esta tragedia. "esto fue un lamentable accidente" dijo el ex presidente Menem y el exgobernador Mestre (padre) cuando llegaron por la tarde a Rio Tercero… pasaron 20 años y no hay respuestas.

Regresé a Moldes con mi familia y ahí estaba mi abuelo Miguel con la torta de sus 90 años, lo abrace y le dije “Feliz cumple!!!”

Informe 16: Nestor Gabriel Martella
Fuente: lavoz.com- lv16.com