Los gendarmes del Escuadrón Clorinda saben que el tramo de la ruta 11 bajo su vigilancia es un camino habitual de cargamentos de marihuana. Por eso están atentos a cualquier situación anormal que presente un vehículo de carga. Sin embargo, en las últimas semanas en ese puesto de chequeo, al igual que en otros controles viales en el norte, los uniformados están muy atentos a otra modalidad de contrabando que representa un misterio en estos días de cuarentena: el movimiento irregular de dinero. Esta vez no fueron billetes los detectados en un camión, sino dos lingotes de oro.

Con un peso de 700 gramos, las autoridades establecieron el valor de decomiso en $ 5.730.000. En operativos desarrollados durante los últimos tres meses en las rutas del norte habían sido confiscados más de $60.000.000 que eran trasladados en forma oculta en camiones.

En la zona de Clorinda, solo en los últimos 15 días, se encontraron US$ 30.000 dentro de un vehículo de transporte y se incautaron otros US$ 50.000 que eran transportados por un remisero.

El último procedimiento se realizó en el kilómetro 1286 de la ruta 11 y en el camión, además del oro, se transportaban rumbo a la ciudad de Buenos Aires ocho celulares de alta gama, otra mercadería que ocupó un lugar importante en el movimiento de contrabando durante la etapa de aislamiento social obligatorio.

Las autoridades notaron que durante la cuarentena disminuyó el traslado de cargamentos de drogas y, en paralelo, aumentó la circulación del contrabando de otras mercaderías, como celulares, indumentaria, cigarrillos y, especialmente, dinero.
Los primeros indicios sobre el anormal movimiento de dinero se habían detectado al inspeccionarse en Santiago del Estero camiones que circulaban en la ruta nacional 34. La repetición de esos hallazgos llevó a las autoridades pensar que se estaba frente a una nueva modalidad del delito y, en consecuencia, los habituales controles viales que se enfocaban en el tráfico de drogas u otra clase de mercaderías de contrabando empezaron a tener una mirada especial en busca de detectar dinero oculto en camiones. Los casos se multiplicaron en varias rutas del norte argentino. Así se pudo detectar ayer el transporte de dos lingotes de oro.

Las investigaciones judiciales apuntan a que se trata de dinero que es destinado a la compra de indumentaria en Buenos Aires, con el objetivo de la reventa en otras provincias. Reemplazaría esa circulación de billetes a los denominados tours de compras y la pesquisa se orientó haciala venta irregular de ropa en la feria de La Salada.

Las autoridades del Ministerio de Seguridad de la Nación también se enfocaron en esa línea de investigación, dado que en algunos de los embarques de dinero decomisado se habrían encontrado detalles de la ropa que debía ser adquirida con esos billetes. De todas maneras, la circulación de dinero en las rutas no se detiene y aumenta el misterio sobre su origen.

Los investigadores intentan determinar el sistema de coordinación que pone el dinero en las rutas, ya que se trata de un mecanismo al servicio de cualquier cliente irregular, como los narcos. La estructura local del tráfico de drogas está divida en grupos que manejan solo alguna parte de la cadena narco. Las bandas que operan con la venta directa de drogas en los barrios no tienen vínculos de comando con aquellos que están a cargo del mecanismo logístico de transporte. Ese último subgrupo ofrece sus servicios de traslado ilegal sin importar mucho la mercadería. Hoy parece que el negocio de transporte irregular encontró un nuevo mercado.
La ministra de Seguridad, Sabina Frederic, también consideró en declaraciones periodísticas que el misterio de los camiones con billetes está relacionado con la "compra de ropa".

Fuente: La Nación