La salud por sobre todas las cosas,  es la consigna suprema en estos tiempos sin embargo en medio de horas que pasan lentas, deportistas, dirigentes , empresarios y simpatizantes analizan como sería volver a la normalidad sin dejar de lado que indefectiblemente se deberán revisar muchas cosas, empezando por los calendarios, la disposición económica para que la rueda vuelva a girar en el ámbito profesional y amateur prácticamente por igual, las eventuales modificaciones reglamentarias y otras tantas cosas mas.

Los clubes mas importantes del país como los mas pequeños que son parte de la vida de cada pueblo esperan que llegue una voz sagrada que determine, ojalá después de Semana Santa, que lentamente se puede volver a competir aunque con el límite insoslayable de la ausencia de público. A nivel de elite los apremios de los negocios de la televisión, sponsors, sueldos de mega estrellas hoy piden a gritos que esta locura se detenga.

En nuestro ámbito, la incertidumbre por saber como se  definirán los ascensos mantiene expectante a Estudiantes de Río Cuarto en la Primera Nacional, casi de igual modo la Liga Regional espera para saber cuando se recuperará la alegría de todo el fútbol desde los mas chicos, pasando por primera A y B,  tanto masculino como femenino.

Y así, en una larga fila, esperan también el rugby de Urú Curé, el boxeo con Adrian Sasso, el hockey Femenino, las actividades en los Polideportivos, nuestro querido Básquet Local , las bochas, las carreras en el autódromo con el Córdoba Pista y categorías nacionales, tantos pibes a quienes imaginariamente observamos en la rampa de largada del BMX, la natación, los maratones de cada fin de semana, las artes marciales, el tenis, futsal , etc etc .

Por el momento quedarían al margen de la vuelta a lo cotidiano los  viajes al exterior, espectáculos masivos y  actividad escolar normal. Paciencia y sabiduría son virtudes tan necesarias en estos tiempos y mas aún cuando todavía no se ve una mínima luz en el fondo del túnel, hagamos que vuelva a brillar quedándonos en casa.