El periodista saudita Jamal Khashoggi fue presuntamente torturado y desmembrado dentro del consulado saudita de Estambul mientras aún estaba vivo, reveló este jueves el diario progubernamental turco Yeni Safak, que citó una supuesta grabación de audio donde se verificaría la presencia del cónsul Mohammed al-Otaibi, quien ayer volvió a Riad.

Arabia Saudita se encargó este jueves de remover a al-Otaibi, que había sido llamado a su país el martes tras la desaparición del periodista disidente, y abrió una indagación sobre el cónsul, reportaron los medios árabes.

En ese contexto, el presidente estadounidense, Donald Trump, aseguró que no le dará la espalda a Riad, aliado clave de Washington en el Golfo Pérsico, por el caso del periodista, Según trascendió, la agonía de Khashoggi pudo durar unos siete minutos, durante los cuales le habrían cortado los dedos, antes de sedarlo, decapitarlo y desmembrarlo.

El diario turco, cercano al gobierno de Recep Tayyip Erdogan, citó grabaciones de los servicios de inteligencia turcos, en los cuales parecen revelarse nuevos detalles del presunto asesinato del periodista, desaparecido durante 15 días.

"Sáquenlo de aquí, me pondrán en problemas", dice presuntamente el cónsul en el audio. "Si quieres seguir viviendo cuando vuelvas a Arabia", cállate, le responde, al parecer, uno de los presuntos asesinos.

El periodista habría muerto en siete minutos, según refirió al Middle East Eye, otra fuente que dijo haber escuchado la grabación. Khashoggi, al parecer, fue llevado de la oficina del cónsul a un estudio adyacente y extendido sobre una mesa. En un momento dado sus gritos se interrumpieron porque habría sido sedado.

Además, el cuerpo fue desmembrado mientras el reportero aún estaba vivo por el jefe de la unidad forense llegada desde Riad, el doctor Salah Mohammed al-Tubaigy. Siempre de acuerdo con la grabación, durante la operación el médico se habría puesto auriculares para escuchar música, invitando a los presentes a hacer lo mismo.

Según el diario The New York Times, el médico forense, un experto en autopsias, se encuentra entre las cinco personas más importantes de la lista de sospechosos de los investigadores turcos. Los demás estarían estrechamente relacionados con el príncipe heredero saudita Mohammed bin Salman: tres miembros de su seguridad privada y un compañero frecuente, Maher Abdulaziz Mutreb, vistos y fotografiado en varios viajes al extranjero, como París, Madrid y Estados Unidos.

Asimismo, 12 sauditas vinculados con los servicios de seguridad de Riad, según el Washington Post, forman parte del grupo de 15 personas sospechosas de haber matado a Jamal Khashoggi. El diario descubrió la presunta pertenencia de los 12 sauditas a los servicios de Riad examinando sus posteos en las redes sociales, e-mails, artículos y otros materiales.

Mientras, la policía turca llegó este jueves a la residencia del cónsul saudita en Estambul para efectuar una inspección en el ámbito de las investigaciones sobre la desaparición del periodista disidente. Al edificio ya había entrado el equipo de investigadores sauditas que sigue la indagación por cuenta de Riad.

"Necesitamos a Arabia Saudita en términos de lucha contra el terrorismo, por todo lo que está sucediendo en Irán y en otros lugares", dijo, por su lado, Trump en entrevista con la cadena Fox. "Sabremos lo que le sucedió al periodista desaparecido a finales de la semana". Después, hablando con periodistas en la Casa Blanca, descartó estar intentando cubrir a Arabia Saudita sobre el caso de Khashoggi. También el magnate pidió a Turquía los audios y vídeos, "si es que existen", añadió..

Por su parte, el Secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, quien partió de Turquía, sostuvo que el presidente Erdogan, "dijo claramente que los sauditas colaboraron con la investigación que los turcos realizan y compartirán las informaciones".

Pompeo mantuvo un encuentro esta mañana (hora local) con su par turco, Mevlut Cavusoglu, quien le informó sobre el curso de las investigaciones. El Secretario de Estado aseguró que Estados Unidos está tomando el caso del periodista desaparecido "seriamente", aunque no comentó detalles acerca de la eventual existencia de una grabación de audio que confirmaría que Khashoggi fue asesinado.

"Si un país realiza actividades contra la ley esto es inaceptable. Nadie defenderá actividades de esa naturaleza".