Bajo la dirección de la doctora Ingrid Waisman, los pediatras realizaron encuestas a papás de niños de 6 meses a 5 años para conocer si el uso de aparatos tecnológicos como televisores, tablets o teléfonos les quita tiempo en otras actividades.

Waisman explicó que se comprobó que los niños usan mucho tiempo los aparatos con pantallas. La doctora dijo que los padres se asombran con las habilidades que desarrollan los niños al manipular estos aparatos, pero no significan que sean más inteligentes, sino que ellos desarrollan esas habilidades porque son el juego que tienen a su alcance.

Los padres son muy dependientes de la tecnología y los niños aprenden, y como las pantallas táctiles son muy fáciles de usar, ellos buscan y encuentran lo que quieren.

“Esto no es ni bueno ni malo, lo que es malo es el exceso, es decir, que solo crezcan intermediados por la pantalla. Es importante que los papas los acompañen en esa búsqueda para que encuentren cosas didácticas y también para que no se excedan en el tiempo”, comentó la doctora.

Waisman recordó que así como los papás controlan donde están sus hijos, que hacen y con quien se juntan, en la realidad virtual debe ser igual: saber que sitios visitan, que cosas ven y como lo interpretan.