La decisión de sembrar el cereal se ha visto afectada por las condiciones climáticas desfavorables, los excesos de humedad en los suelos y el precio actual del cultivo a futuro.
Las precipitaciones acumuladas durante la última semana agudizan los problemas hídricos que presentan zonas del margen este del área agrícola nacional. Ésto, junto con los excesivos niveles hídricos de los suelos, que impiden el normal tránsito de las maquinarias, y el precio actual del cereal a futuro, hace que los productores opten por reducir la superficie destinada al trigo.
De este modo, la Bolsa de Cereales estima que se implantarán 100 mil hectáreas menos que lo previsto al inicio de campaña, con lo cual a la fecha la nueva proyección es de 4.200.000 hectáreas.
En consecuencia, el incremento de superficie interanual ahora es del 16 %, entendiendo que en el anterior ciclo 2013/14 se cubrieron a nivel nacional 3.620.000 hectáreas. Cabe destacar que, de continuar el clima desfavorable para la siembra de trigo, la caída de área puede ser aún mayor.
A la fecha se sembró el 80 % de las 4.2 MHa ahora estimadas para el presente ciclo. Dicho avance permite calcular un progreso intersemanal de 7,5 puntos porcentuales y un retraso interanual -8.7 puntos. En números absolutos ya se sembraron en el país unas 3.36 MHa.
Las mismas lluvias que ocasionan excesos hídricos y hasta anegamientos sobre el margen este del área agrícola, aportan muy buenas condiciones tanto para la siembra como para el desarrollo del cultivo sobre el margen oeste.
En cuanto a la soja, las lluvias registradas vuelven a demorar la recolección sobre la región bonaerense, en donde se ubica la totalidad de la superficie aún pendiente de cosecha a nivel nacional. Pese a ello, la recolección logró cubrir un 99,2 % de la superficie apta, reflejando un avance intersemanal de 0,7 % y reduciendo el retraso interanual a -0,8 %. El rinde medio nacional mantiene su leve tendencia a la baja y esta semana se ubicó en 28,6 qq/Ha, valor que permitió acumular una producción parcial de 55,3 MTn; la Bolsa de Cereales prevé que una vez finalizada la recolección sobre la superficie aún pendiente, se alcance un volumen final de 55.500.000 toneladas.
A pesar de dichas precipitaciones, el progreso de la recolección en maíz denotó un avance de 7 puntos porcentuales. De este modo, la trilla a nivel nacional alcanzó el 65,4 % del área apta, habiendo acumulado un volumen en chacra superior a los 16 MTn y un rendimiento medio de 74 qq/Ha. De esta manera el retraso interanual se ajustó en 4 puntos porcentuales, quedando como resultado en -26,6 %, aunque la demora continúa siendo muy grande.
Este fuerte avance en la recolección de maíz se debe al progreso en zonas como el NOA, Córdoba y Norte de La Pampa-el Oeste de Buenos Aires. En estas regiones se están trillando lotes con mayor humedad en el grano de lo que exige el mercado (entre 16 y 18 % Hº). Esto se da no sólo por la demanda que hay en el mercado, sino también por la preocupación que hay por parte del productor en resignar rendimiento a causa del vuelco de las plantas, ocasionado por fuertes vientos y por el poco anclaje que en esta campaña presentan los maíces en gran parte de las zonas.
Otro de los factores preponderantes son las enfermedades fúngicas que se están relevando, no sólo en los tallos sino también en las espigas de los maíces que aún continúan en pie. Esto influye de sobremanera para que el productor tome la decisión de cosechar húmedo e incrementar los costos en la secada.
Frente al escenario actual, se mantiene una proyección final en 25.000.000 toneladas. Esto a su vez toma en cuenta el ajuste que se debe hacer por la corrección del dato en húmedo. De concretarse, este volumen estaría un -7,4 % por debajo de lo recolectado la pasada campaña.
Por último, la cosecha de sorgo avanzó un 9,7 % durante los últimos 15 días, elevando la recolección nacional al 77 % del área apta y reflejando un retraso interanual de 16 puntos porcentuales. La principal causa de esta demora en la cosecha es la falta de piso en lotes y caminos. Al presente informe el rinde medio nacional es de 45 qq/Ha, lo cual con 770 mil hectáreas recolectadas permite acumular un volumen de 3,45 MTn.
Finalmente, y teniendo en cuenta el panorama descripto, se mantiene la proyección de producción en 4.300.000 toneladas para fin de campaña. De concretarse dicha proyección, resultaría un -4,5 % por debajo de lo recolectado la campaña previa, la cual finalizó en 4,5 MTn.