El encuentro tendrá como objetivo oficial celebrar el primer año de la asunción del Santo Padre al frente de la Iglesia. Será el tercer encuentro entre el Papa y la Presidenta en ese período.

En la Casa Rosada interpretaron ayer el encuentro como una nueva señal de acercamiento a la Iglesia y de armonía respecto de temas espinosos como la lucha contra el narcotráfico. También lo leyeron como un apoyo papal a la pacificación social en medio de pujas salariales de las negociaciones paritarias.

La Presidenta había solicitado audiencia con el Papa hace meses a través de una gestión diplomática del secretario de Culto, Guillermo Olivieri, y del embajador argentino ante la Santa Sede, Juan Pablo Cafiero. Y como el Santo Padre no visitará la Argentina hasta 2016, le concedió otra audiencia en Roma. (Fuente:Lanación.com)