Se quitó la vida en la cárcel de San Luis el riocuartense Claudio Nahuel Bohorquez (26) quien se encontraba procesado por el homicidio de su abuela Mirta Reich, de 70 años de su tío, Alexander Aime, de 45, ocurrido el 15 de enero de 2019 en un campo de Juan Llerena San Luis.

Hace casi dos años, el joven fue procesado por el juez Penal 2 de Villa Mercedes, Leandro Estrada, bajo la sospecha de haber asesinado entre los últimos minutos del 14 de enero y los primeros del día siguiente a su abuela, Mirta Frida Reich, y a su tío, Alexandro Oscar Aime, en el campo “La Esperanza”, cerca de El Morro.

Después de matarlos, el autor prendió fuego los cuerpos. Uno de los cadáveres estaba en una de las seis habitaciones de la casa –se estimó que era el de la mujer– y el otro, a la intemperie, donde había otro foco ígneo. Estaba a poco más de 80 metros de la casa, cerca de un enorme galpón de chapas, que madre e hijo usaban como depósito y cochera.
 
Bohorquez también residía en el establecimiento rural. Lo que llamó la atención de los investigadores desde el comienzo fue la explicación que el joven dio tras los homicidios. Dijo que escapó de la estancia cuando escuchó tiros. 

Pero la singularidad fue que en lugar de ir al destacamento policial más próximo a pedir ayuda –está en La Esquina, a unos 15 kilómetros– se fue en la camioneta de su tío a Río Cuarto. No buscó ayuda ni llamó a la Policía si creía que sus familiares podían estar en peligro.