La demora de China para enviar el dinero para las constructoras de los gasoductos troncales en esta provincia, obligó a la administración de Juan Schiaretti no sólo a relicitar parte de la obra sino a seguir colocando deuda para contar con los recursos.

Ayer el ministro de Finanzas, Osvaldo Giordano y el presidente del Banco de Córdoba, Daniel Tillard, encabezaron la presentación de la emisión de otro título por 150 millones de dólares con vencimiento en 2026 para financiar parte de los trabajos.

La presentación, dirigida a inversores locales, constituye el segundo tramo de la emisión de 150 millones de dólares en octubre pasado a una tasa de 7,1/8%. El programa global es de 460 millones de dólares.
Giordano destacó que Córdoba "se caracteriza por su responsabilidad de pago y esto es un diferencial vital para la inversión y el desarrollo".

En febrero el gobierno provincial colocó bonos por 1.900 millones de pesos -en una licitación de la que participó la Anses- para encarar las obras de los tramos que ganaron en primera instancia (y repitieron después) Iecsa y Electroingeniería con financiamiento de bancos chinos. Los recursos equivalen al 20% los contratos firmados por las empresas.

Aunque el gobierno esperaba que en marzo el dinero chino estaría, todavía sigue esperando. "Son muy duros y se empezaron a poner más rígidos en cada cláusula del acuerdo. Es un contraparte muy difícil", confía a LA NACION una fuente provincial que participa de las conversaciones.

Electroingeniería se presentó junto a China Petroleum Pipeline Boreau (CPP) mientras que Iecsa lo hizo con China Communications Construction Company Ltd. (CCC). La brasileña Odebrecht fue la única sin socio chino.
Los funcionarios cordobeses -ya hicieron ocho viajes a China por este financiamiento- admiten que el proceso es muy burocrático y "se va complejizando cuando parece estar a punto de cerrarse; son duros".

La experiencia de Córdoba es un antecedente para las gestiones que por estos días realiza una delegación de Cancillería y Finanzas en China para acordar fondos para obras de infraestructura ferroviaria y de energía, como la mejora del Ferrocarril Belgrano Cargas y el complejo de represas Kirchner y Cepernic. Entre el 14 y el 18 de mayo Macri hará una gira por ese país.

Garantía nacional

El plan de los gasoductos troncales -la obra pública más ambiciosa de Schiaretti- comprende 16 anillos que deberían estar terminados a inicios de 2018. Odebrecht lleva ventaja en la ejecución por la demora del fondeo chino, por eso el gobierno decidió la relicitación.

Cuando el convenio con los chinos se presentó, según los cordobeses, "no estaba tan claro que la garantía era soberana" (firma de la Nación) que después exigieron. "En ese caso a la demora de ellos se sumó la salida de (Alfonso) Prat Gay del gabinete y se prolongó todo".

Hace una semana, cuando el presidente Mauricio Macri se reunió con Schiaretti y acordó el aval de la Nación para créditos en Europa por 300 millones de dólares para la construcción de cinco hospitales y de 40 escuelas Proa, la garantía soberana para el financiamiento chino se habría resuelto. Con esa firma, habría un nuevo viaje para tratar de destrabar la llegada de los fondos.

La Nación