Irma Roy murió a los 84 años, en el Sanatorio Agote, donde se encontraba internada desde hace 10 días luego de sufrir un accidente doméstico. Madre de la también actriz Carolina Papaleo, estuvo casada dos veces, primero con Eduardo Cuitiño, de quien enviudó, y luego con el padre de su hija, Osvaldo Papaleo.

La actriz y política -ex diputada por el partido justicialista- inició su carrera en los años 40. Su primera aparición en cine fue en Los Cinco Grandes del Buen Humor y una chica, de Augusto César Vatteone; su último trabajo cinematográfico fue en 1989 en DNI (La otra historia). Su primer éxito televisivo fue Simplemente María (1960). Irma fue convocada por Alejandro Romay y ese sería el principio de su consagración como actriz.

En teatro encabezó obras dramáticas como Alguien como vos, Flores de acero, No hay que llorar y Los árboles mueren de pie.

Roy estuvo exiliada durante la dictadura militar junto a su familia, decisión que tomó tras sufrir algunas presiones. Apenas vuelta la democracia, en 1983, la actriz volvió al país. Fue por ese entonces cuando se sumergió en la vida política. Desde el PJ fue una de las impulsoras de la ley de cupo femenino; también estuvo comprometida con la ley de adopción y la creación de la ley de violencia familiar. Irma tuvo que afrontar una dura acusación cuando se desempeñaba como legisladora por cobrar sueldo y jubilación alta. Razón por la cual decidió abrirse.

Sus últimos trabajos televisivos fueron Los buscas de siempre y Amor en custodia. El año pasado protagonizó radioteatros en el ciclo "La radio en el teatro", dirigido por Víctor Agú.