Luego del trágico incidente ocurrido hace tres meses en el barrio 400 Viviendas, donde dos niños perdieron la vida a causa de un incendio, la familia Torres finalmente volverá a vivir en el domicilio ubicado en calle Estrada y Unión de los Argentinos, ya que se les negó la
solicitud de construir un nuevo hogar.
Andrea Aravena, madre de los niños, comentó que desde el municipio le cambiarán el techo a su antigua vivienda, así pueden volver a vivir en el lugar.
Ante la negativa de poder construir una nueva casa, sólo indicó que hubo "un problema con el terreno” porque no estaba a su nombre y eso habría sido la causa principal que negó la posibilidad de edificar un nuevo inmueble.
Aravena manifestó que últimamente ha recibido ayuda por parte de Promoción Social y vecinos de la ciudad, y señaló: “Lo esencial es tener la casa para poder vivir, porque estar de un lado a otro es difícil”.
Dijo que actualmente están viviendo en un hotel, pero “con todo el dolor vamos a volver a la casa”.
Informe16 – LV16.com