Representantes del Colegio de Arquitectos, Sociedad Rural Río Cuarto, Colegio de Ingenieros Civiles, Asociación de Ingenieros Agrónomos del Sur de Córdoba (AIASC), representante del Instituto Municipal de Planificación Urbana de Río Cuarto (IMPURC) por el bloque Unión por Córdoba, Docentes Universitarios de la UNRC y de UM-Cervantes, becarios del CONICET, emprendedores rurales independientes y el Colectivo Social “Ladran Sancho” firmaron este martes un documento en donde le reclaman a la Comisión de Labor del Concejo Deliberante el tratamiento y pase a comisión del cuestionado proyecto de ordenanza para profundizar su tratamiento. 
“Aunque pensemos que teóricamente una ciudad sería mucho más sustentable si fuese de tipo "compacta" -ya que los costos de transportes, infraestructuras y servicios en general se aminoran concentrando la población en menor superficie-, creemos que si el modelo tiende a dispersarse, debemos prever las consecuencias, es decir que para cualquier situación necesitamos planificar el territorio y sus interfaces, predecir comportamientos de aspectos diversos, o por lo menos tener consensos mayoritarios sobre los mismos; no son cuestiones que se resuelven por solicitud de un privado, sino que es el Estado municipal quien debe generar el ámbito de debate y respetar lo que nazca de ello", coincidieron las autoridades del Colegio de Arquitectos luego de reunirse con organizaciones.  
El Colegio no está en contra de ningún emprendimiento privado sino que busca discutir la planificación urbana. “Nos interesa abrir el debate y la reflexión hacia lo que la aprobación del pedido del Ejecutivo traería consigo: a través de estos planteamientos, lo que se vislumbra es un crecimiento de la ciudad desintegrado de la trama urbana existente, desconectados, ya que no se planifica dónde, cómo, no se prevén equipamientos ni accesibilidades futuras, ni espacios públicos, no se pone límite a las dimensiones de estos emprendimientos, etc.
Por otra parte, no se están midiendo los costos de las nuevas situaciones de incompatibilidad entre el uso de suelo residencial y productivo; así vemos cómo los sectores relacionados al agro, también manifiestan sus preocupaciones. Se está moviendo la frontera agrícola y por ende el límite de fumigación con agroquímicos, se está transfigurando la zona de amortiguación o el cinturón verde entre las áreas urbanas y las netamente rurales. En esto que parece muy técnico, existe un costo social que no se dimensiona, existen actividades que sustentan vidas, formas de subsistencia que en algún momento futuro se verán modificadas por el crecimiento de la ciudad, seguramente, pero hoy, estamos muy lejos y se puede mitigar el impacto", remarcaron los especialistas del Colegio de Arquitectos junto a los representantes de distintas instituciones. 
El Colegio de Arquitectos subraya la necesidad de respetar el trabajo multidisciplinario de los profesionales de esta ciudad de cara a entrelazar la cultura, la economía, la política, los aspectos naturales/ambientales sobre la base de un pensamiento sustentable que piense una ciudad a futuro. 
En 2011 se aprobó el presente Plan Urbano, el cual generó controversias en algunos puntos (edificios en altura en zonas céntricas, retiros laterales en lotes pequeños del casco céntrico, etc) pero en este caso se discute aquello en lo que se estaba de acuerdo: las zonas de interfaz y cinturones verdes (sectores periféricos). Ya existen casos conocidos de incompatibilidades respecto a los productivo vs. el uso residencial: el caso del Barrio del Aero Club, Barrio Aires del Oeste, o en la zona norte la problemática que generan avícolas y criaderos de porcinos, con el nuevo sector de casas-quinta. Estas experiencias previas deben enseñarnos sobre los conflictos en puerta al promover o permitir planteos residenciales donde no estaban previstos y sobre el peligro de que el Estado Municipal delegue sus facultades sobre el territorio, vulnerando las garantías del bien común. 
El espíritu con el que el Colegio de Arquitectos y el resto de las instituciones reclaman e insisten en el tratamiento del cuestionado proyecto es para discutir la planificación urbana sobre la base de un pensamiento sustentable, que articule la sociedad, la economía y el medio ambiente de forma equitativa, viable y soportable.