El domingo a las 11 de la mañana un conocido delincuente del barrio Alberdi efectuó disparos en la via pública, sus vecinos llamaron a la policía para advertir el hecho.

Cuando la policía llegó al lugar, se dan cuenta de que se trata de un joven conocido en la jerga policial como “el cara de luna”.

El “cara de luna” en el momento que advirtió la presencia de los comisarios, les comenzó a disparar, y luego el joven de 29 años se da a la fuga, por lo que comienza la persecución.

El delincuente ingresó a su domicilio, la policía también, y en la vivienda una mujer de 45 años avisa a la fuerza policial que el hombre se había escapado por el patio.

Al día siguiente, la fiscalía de la comisaría del barrio Alberdi ordenó que se allane la vivienda del delincuente y su correspondiente detención.

Con la orden de allanamiento, los comisarios se dirigieron al lugar y entraron a la vivienda del delincuente. En la casa no se encontraba nadie. Pero, según contó la comisario inspector Marina Rodríguez el sujeto fue encontrado en el interior de un pozo ciego de tres metros de profundidad junto a su hijo de dos años. Lo encontraron porque siguieron el sonido de los sollozos que el niño asustado, realizó.

Finalmente el hombre fue condenado por abuso de arma de fuego, y fue alojado en la alcaldía de la departamental.


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