Francisco saludó ayer a la diócesis de Río Cuarto por la celebración de la Inmaculada Concepción. Los festejos de la Virgen terminaron en la catedral a causa de la lluvia.
El 8 de diciembre, fieles de la ciudad de Río Cuarto celebraron el día de la Virgen de la Inmaculada Concepción con una procesión, misa y fiesta.
La misa estuvo precedida por el Obispo Adolfo Uriona, quien habló del pecado original y cómo sus consecuencias se reflejan en los medios de comunicación.
El evento se organizó, como todos los años, en la Plaza San Martín, sin embargo a causa de las lluvias, tan comúnes por estos días, la celebración debió terminarse abruptamente en este espacio y todos los feligreses se trasladaron hasta la Catedral, donde se finalizó con la misa y luego se procedió a la celebración que se tenía prevista.
A causa de la lluvia, el Obispo no se pudo detener en Radio Río Cuarto para realizar la bendición del árbol de nuestra emisora, que como todos los años se arma para esta fecha y es el más grande del sur de Córdoba, siendo visto desde los distintos barrios de la ciudad.
Una de las grandes sorpresas para todos los convocados a esta fiesta de la fe se dio cuando el Obispo presentó un video enviado por el Papa Francisco quien con mucha armonía, saludó a la Diócesis de Río Cuarto y en su mensaje manifestó: "Dios siempre perdona" y pidió que los fieles no le tengan miedo.
Su video terminó con un “recen por mí, y que Dios los bendiga”.
Fieles se mostraron emocionados ante el saludo del Papa a la diócesis de Río Cuarto por el Día de la Virgen.
Lo que dijo el Papa a nuestra querida ciudad:
“Hoy es un día feliz celebramos la pura y limpia Madre de la Concepción.
Tuve el gozo de abrir la puerta santa, comienza el año de la misericordia. Misericordia es el nombre de Dios.
Uno de los padres más antiguos dijo que cuando Dios creó a su hijo, se puso muy contento porque creo a alguien a quien perdonar. Dios siempre perdona, no le tengan miedo, es Padre.
En este día de la concepción, les mando un saludo en la fiesta de ustedes. Les pido que vivan todo esto con alegría, porque es el signo del cristiano.
Recen por mi. Que Jesús los bendiga y la Virgen Santa los cuide”.