Mauricio Macri puso fin a su campaña para la segunda vuelta con un acto en el que omitió las referencias directas al kirchnerismo, pero llamó a trabajar por un cambio. Fue en la ciudad de Humahuaca, en donde estuvo acompañado por el gobernador electo de Jujuy, el radical Gerardo Morales, además de referentes del PRO.

Vestido con un jean y camisa, el jefe de Gobierno porteño brindó un discurso de 12 minutos, en los que prometió trabajar para "ayudar a que los argentinos vivan mejor". "Voy a dejar lo que tengo y lo que no tengo para que tengan mejores oportunidades", indicó.

El candidato de Cambiemos aseguró que su espacio ha armado "un equipo inmenso que está listo para construir la Argentina que soñamos". "Esta Argentina que soñamos la hacemos desarrollando la capacidad de cada uno", afirmó.

Abajo del escenario, los militantes coreaban cánticos como "se siente, se siente, Mauricio Presidente" o "sí, se puede".



"Podemos vivir mejor, merecemos vivir mejor. Se puede vivir en una Argentina con pobreza cero", dijo al mencionar uno de los que fueran sus ejes de campaña. También prometió "echar al narcotráfico del país" y generar una educación pública que genere orgullo.

"Hay unir a los argentinos porque ya estuvimos demasiado tiempo enfrentados. Se terminó la época de las banderas que nos ponen de un lado o el otro, ahora es todos juntos", remarcó.

Macri le dijo a la muchedumbre que participó del cierre que contaba con ellos para la elección del domingo. "En estos días que nos quedan trasmitamos la alegría, que cada uno se vaya a su casa sabiendo que esto comienza", añadió.

El líder del PRO terminó su alocución repitiendo de manera eufórica "vamos Argentina, cambiemos".