“El Frente para la Victoria perdió en 4 distritos: en Córdoba, en Capital Federal, en Corrientes y La Pampa. Y ganó como premio consuelo en La Rioja, donde fue Scioli presuroso a festejar. Pero fueron distintos, insisto, opositores los que se repartieron la victoria.

 Pese al sufragar, el domingo último, el 20% más del padrón nacional,  la oposición no emerge en bloque para  enfrentar al Kichnerismo, que suma todo lo que le queda en cada elección. Además de haber ganado, presupuesto, en Salta, Chaco y Tierra del Fuego, pero que son distritos con poca densidad poblacional,  Cristina sin embargo, no se arredra. Desde Tucumán, ayer, volvió a hacer campaña sin rubor por la cadena, pidiendo el voto para el Kichnerismo y apuntó a la polarización con Macri cuando dijo: “habrá intentos neoliberales”; también dijo: “esta es o vivimos una independencia en serio. De la Sota desde Río Cuarto dijo:”hay independencia, en un país que no hay miseria”.

En la metrópolis, los K quedaron terceros como en Córdoba, y por primera vez no irá al ballotage. Cristina y Rescalde, recuerdo, en plena derrota, valoraron el no  del referendum griego, miraron para el otro lado.  Un retroceso, aun que al Pro le hubiera convenido tener al frente a  Rescalde porque la confrontación de modelos hubiera sido más nítida para un resultado, hablo del Pro.

Lousto, que denuncia presiones para que se baje de la segunda vuelta porque puede deslucir el triunfo de Macri del domingo, es más complicado como oponente porque fue al comicio con franquicia de la Unión Cívica Radical y de la Coalición Cívica, socios los tres con el Pro a nivel Nacional. El diputado de Eco dijo que no será funcional al Kichnerismo y que irá al ballotage. Lo apoyo Sansz, para que lo atribuya con sus votos de su sector en las PASOS. Aguad dijo que debe bajarse, y Carrio lo va a votar. Pero Lousto, metió presión  porque quiere crecer políticamente.
 
¿Qué hará el Kichnerismo de Rescaldi con el 21%? Aparentemente será   prescindente. Pero votaría sin que se note a Lousto para deslucir a Macri. O sea digamos que  se está comportando como el mejor aliado de Scioli, a quien los gobernadores peronistas  le plantean  necesidades ya como si fuera el presidente.
 
El PJ  cuando olfatea que el poder está en riesgo, borra las diferencias internas y es uno solo.
Tampoco el Pro es un partido vecinal como dijo Zanini, el triunfo del domingo de  Larreta tuvo impacto nacional. El macrismo no quiere exponer esa victoria de 20 puntos,  que no reverá a Lousto,  porque solamente se han dado vuelta a ballotage con resultados de la primera vuelta con 5 o 7 puntos pero nunca a 20.”