El Gobierno ya pagó casi $ 50 millones por la obra, que no empezó; Planificación afirmó que el gasto está justificado
La diputada nacional y precandidata a presidenta Margarita Stolbizer presentará hoy una denuncia contra el ministro de Planificación, Julio De Vido, para que se investigue la presunta comisión de los delitos de malversación de caudales públicos, negociaciones incompatibles con la función pública y fraude a la administración pública por el pago de casi 50 millones de pesos para una faraónica obra que no empezó a construirse.
Además, la líder de GEN amplió la acusación contra José Francisco López, secretario de Obras Públicas; Abel Fatala, subsecretario de Obras Públicas, y el ex director nacional de Arquitectura Marcelo Cufre.
"Éste no es el único caso, pero sirve para mostrar la falta de prioridades que tiene el Gobierno y expone las grandes mentiras del relato. Construir esta megatorre a 20 metros del Riachuelo, donde hay gente con tantas necesidades, es una muestra. Hacen negocios con los contratos", dijo Stolbizer.
Como anticipó LA NACION anteayer, el área que controla De Vido desembolsó, entre 2011 y 2013, $ 48.090.000 en concepto de salarios que cobraron los arquitectos que realizaron el proyecto. Según dijeron especialistas consultados por este medio, "pagar un proyecto por anticipado por un edificio que va a realizar un tercero es un disparate".
Se trata de la torre única de telecomunicaciones del área metropolitana, en Avellaneda, de 368 metros. Allí funcionaría una antena de la TV Digital Terrestre. La torre que se aprobó en el proyecto tendría una altura de 266 metros, a la que se sumaría una antena de 102. Además, contaría con un espacio cultural, 12 pisos estarían destinados a oficinas, un restaurante panorámico y un mirador a 136 metros de altura. En 2011 la obra estaba presupuestada en US$ 173 millones; tres años después se fue a casi el doble: US$ 320 millones.
Desde el Ministerio acusaron a LA NACION de informar "en forma tendenciosa, sesgada y malintencionada" y destacaron que "el monto del contrato incluyó todos los honorarios de asesores especiales de las diferentes disciplinas de ingeniería involucradas en las etapas de proyecto", tal como fue destacado en la nota publicada hace dos días.
Los dos arquitectos que ganaron el concurso, Héctor Muñiz y Jorge Príncipe, están inscriptos en la categoría más baja del monotributo, aunque esta condición "no es un impedimento para participar en el concurso", según dijeron desde Planificación en un comunicado.