Durante el fin de semana tres nuevos crímenes sacudieron a esta ciudad, donde la escalada de violencia parece no tener freno en el tórrido y húmedo enero, con 20 homicidios en los primeros 18 días de 2015. En enero del año pasado la violencia extrema también pasó factura y encendió la preocupación del gobierno santafecino, cuando se habían registrado 32 homicidios.

Este mes amenaza con reproducir aquella trágica tendencia y puso este problema en el tope de una agenda atravesada por el año electoral, que en Santa Fe se iniciará el 19 de abril con las PASO.

Ante el recrudecimiento de los crímenes, se gestó una especie de operativo clamor (tanto de fuerzas políticas como de entidades no gubernamentales) para que regresen los 2000 gendarmes que patrullaron las calles de la ciudad durante 250 días, algo que el secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni, negó de plano en una carta dirigida al Foro Regional Rosario (ver aparte).

"Nos hemos convertido en juntacadáveres", advirtió con resignación un jefe policial para graficar la compleja situación que atraviesa Rosario, donde se empezaron a multiplicar desbordes de furia y bronca (como expresión de venganza) de vecinos y familiares de las víctimas.

Durante la madrugada en Barra y Génova, en el corazón de Empalme Graneros, fue asesinado de una puñalada en el pecho Marcelo Biscoglio, de 15 años. Según las fuentes policiales, el crimen se produjo en medio de una discusión entre dos familiares. Uno de ellos era amigo de Biscoglio, que salió a defenderlo y terminó muerto por una herida con un cuchillo. Otro joven que también se metió en la disputa fue baleado en una pierna.

Esa zona caliente de Empalme Graneros recuerda a sus muertos en las paredes. En los muros que dan a la escuálida plaza o campito que está sobre Génova se honra a los caídos del barrio, entre ellos a Ariel Ávila, el rapero que cantaba contra los narcos y fue asesinado por los soldaditos de un búnker en Campbell y Génova.

El 30 de diciembre pasado condenaron a diez años de prisión a Bruno Acuña, de 20 años, uno de los asesinos del cantante. Hace poco menos de un año esa zona de Empalme Graneros se transformó en un escenario bélico entre los amigos de "Chucky" y los soldaditos. El búnker terminó derrumbado y las cicatrices de la pelea quedaron estampadas en las puertas y las paredes en forma de agujeros.

Ayer a la madrugada el barrio volvió a encenderse, porque el crimen de Marcelo Biscoglio desató la rabia de sus amigos y familiares contra los presuntos asesinos, a los que intentaron quemarle la casa que habitan y, luego, los persiguieron a tiros. El episodio terminó con dos mujeres baleadas.

Una joven embarazada de 9 meses recibió un balazo en el abdomen. Y su madre, de 38 años, resultó herida en la rodilla izquierda. Ambas fueron trasladadas al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (HECA), donde quedaron internadas. La joven embarazada estaba en grave estado y su vida corría peligro. Luego de estos incidentes, la policía detuvo, por orden del fiscal Miguel Moreno, a dos hombres de 32 y 38 años apuntados como los supuestos asesinos de Biscoglio.

Durante la madrugada, se produjo otro homicidio en la esquina de Lamadrid y Cafferata, donde fue acribillado de tres balazos en el pecho Brian Wegner, de 23 años. Este joven se trasladaba en una moto junto con un amigo cuando fue interceptado por un Renault 9 color gris en el que viajaban dos hombres, que, sin mediar palabras, apuntaron y dispararon contra Wegner.

Hubo más: en la tarde del sábado fue asesinado de siete balazos Juan de Dios Godoy, de 32 años, quien murió en la puerta de su casa, en Felipe Moré 3800, en barrio Triángulo. El crimen ocurrió alrededor de las 15.30, cuando Godoy atendió un llamado a la puerta de su casa. Allí, fue sorprendido por un hombre que le efectuó siete disparos y lo dejó gravemente herido y se fugó.

La víctima fue trasladada en un automóvil particular de un vecino al hospital central de esta ciudad, donde falleció una hora después.

Fuentes de la investigación señalaron que la víctima contaba con antecedentes por delitos contra la propiedad y las personas, y que el 1° de este mes había resultado herido en otro incidente.(La Nación)