El instructor de vuelo a bordo de la aeronave, Jorge Irastroza, murió la mañana del 17 de septiembre producto de las heridas graves y quemaduras recibidas al accidentarse la avioneta.
La nave cayó en un predio propiedad de la familia Salas (“Chilo”) que se encuentra ubicado a escasos metros de la cabecera de la pista de tierra del Aeródromo local, donde se encontraba un equipo de maquinarias realizando labranza.
En la nave, un bimotor, estaban realizando vuelos de instrucción toque y despegue el piloto Matías Lopez, de nuestra ciudad y el instructor Jorge Irastorza de General Pico, según confirmó el presidente de la institución Ezequiel Paul.
Según dichos de testigos, al parecer luego de despegar y utilizando uno de los motores, esto se desprende al observar la hélice del otro motor en bandera, el avión no habría tenido sustentabilidad debido a la falta de velocidad y por ese motivo se precipito a tierra, incendiándose de inmediato, quedando reducida prácticamente a cenizas.
Las primeras versiones indican que ambos ocupantes estaban con vida y se movilizaban por sus propios medios, aunque Lopez lo hacía con menor dificultad. Fueron Trasladados al Hospital Municipal.
Imagen: distritointerior.com