La comisión de Juicio Político se reunió esta tarde en Diputados para tratar los pedidos de enjuiciamiento contra Amado Boudou por la causa Ciccone, pero el kirchnerismo rechazóin limine todos los planteos para juzgar en el Congreso al vicepresidente.

Al comienzo de la reunión, el oficialismo aprovechó la mayoría que tiene en la comisión y votó un informe preliminar donde se bloqueaban todos los pedidos de juicio político a Boudou, lo que generó un fuerte repudio de la oposición que pretendía, al menos, debatir la cuestión.

Con el voto de los 17 diputados del Frente para la Victoria que integran la comisión -sobre un total de 31 miembros-, el cuerpo rechazó todos los pedidos de enjuiciamiento contra Boudou tras la lectura de un informe leído por la presidenta de ese cuerpo asesor, Adela Segarra.

En ese informe el FPV argumentó que la causa Ciccone "se esta tramitando" aún en la justicia y que todavía "no hay sentencia" alguna contra el vicepresidente.

Boudou fue procesado el viernes pasado por el juez Ariel Lijo por presunto cohecho y negociaciones incompatibles con la función pública por pretender adueñarse, por medios espurios, de la imprenta Ciccone Calcográfica.

ESTRATEGIA KIRCHNERISTA

Ayer, el kirchnerismo que venía frenando la reunión de la comisión de Juicio Político cambió de estrategia: convocó, de manera sorpresiva a la comisión con la seguridad de contar con los votos necesarios para rechazar la embestida opositora.

Antes de la reunión, hoy la diputada Adela Segarra anticipó que el bloque oficialista estba "alineado" en la defensa de Boudou, al manifestar que el "vicepresidente electo es inocente hasta que se demuestre lo contrario".

Para Segarra, "mientras que la Justicia intervenga no debería tener tanto impacto mediático" la causa Boudou, quien es el primer vicepresidente procesado en la historia de la Argentina.

Aunque no cuente con los votos, la oposición pretende denunciar el manto de protección que los legisladores kirchneristas hacen sobre Boudou.

El espacio de la comisión se presentaba como el escenario público para que los legisladores opositores puedan expresar sus repudio ante la situación del procesamiento del vicepresidente.

Fuente: LA NACIÓN