El insólito desembarco de Mendoza comenzó con una nota de Perfil.com, en la que la legisladora, consultada por su intención de llegar al Bailando, respondió: “Jaja me tiene que llamar Marcelo MI amigo”. En adelante, comenzó un intercambio en Twitter entre Tinelli y Mendoza.

Lo que parecía un chiste se volvió real. Mendoza se ofreció a bailar cumbia con Tinelli o “con los aborígenes del Chaco”. El conductor, sin perder la oportunidad, aceptó el desafío en minutos.

“Ya hablé con Marcelo, y cuando vaya a Buenos Aires, este fin de semana, nos vamos a encontrar con su producción. A mí me encantaría bailar“, resaltó la legisladora en diálogo con Mariana Fabbiani.

“A Chaco le faltan muchas cosas, le falta agua potable, estamos construyendo el acueducto, nuestras realidades son diferentes a las que por ahí hay en Provincia de Buenos Aires o en Capital”, señaló Mendoza.

“Yo no soy la ex de nadie. Tenemos respeto mutuo con el padre de mis hijos. Yo trabajo como legisladora en el Chaco y tengo mis votos”, destacó, y remarcó que en su familia son todos “de Boca y de Chaco For Ever”.

“Coqui lo conoce a través mío a Marcelo, hace muchos años”, reveló la diputada. “Yo tengo una vida profesional en Capital Federal, hay otra parte que no se conoce de mi vida”, observó.

Por último, consideró que Tinelli no se burla de su ex. “Uno debe ser capaz de reírse de uno mismo, a mí me gustó la imitación, y estoy segura de que a él también le gustó“, cerró