El  fiscal del fuero de Lucha Contra el Narcotráfico, Marcelo Fenol confirmó a La Voz que ya tienen identificados a los cinco presos que se filmaron en una “fiesta” en la que consumían droga y hacían ostentación de armas.

"Están los cinco identificados. Uno de los cinco que aparece en este video ya había sido imputado por un hecho anterior, bajo sospecha de tenencia simple de estupefacientes. En diciembre pasado, durante una requisa, se le había encontrado marihuana en su celda. La cantidad era escasa", dijo.

En tanto, el jefe del Servicio Peniticiario de Córdoba, Juan María Bouvier, dijo en declaraciones radiales que efectivamente se comprobó que el video, que los reclusos compartieron a través de Whasapp, se filmó en una celda de la cárcel de Bouwer.

Bouvier dijo que a los cinco internos que aparecen en el registro les habían secuestrado seis celulares y una navaja durante una requisa del 30 de marzo. Lo que resulta curioso es que ese video no se entregó a la Justicia y recién lo hizo el director del establecimiento carcelario después de que el fiscal iniciara la investigación a  partir del video difundido por este medio.

"El video llegó el mismo día a través de Fiscalía General y del director del módulo en Bouwer donde ocurrió, que es el MDX2", precisó Fenol. Sugestivamente, el revelador video había sido entregado días antes al fiscal general Marcelo Moyano por un periodista.

Las imágenes difundidas en exclusiva por La Voz tuvieron una repercusión inmediata en medios canales, radios y sitios de Internet de todo el país. El contenido del video, con la presencia de cinco internos filmándose con un celular, uno de ellos armado y aspirando cocaína del filo de una navaja de gran tamaño, generó un escándalo de proporciones y rápidamente se impuso como la noticia nacional más importante del país durante la mañana.

"A primera vista, estos internos representan al eslabón final de la cadena, el del consumidor. Vamos a investigar la posible complicidad de personal penitenciario para que ingresen los estupefacientes", indicó Fenol.


"También está bajo estudio si filmarse y difundir el acto de consumo puede interpretarse como preconización de estupefacientes o uso ostensible de estupefacientes", remarcó el fiscal.

Esa figura está contemplada en el artículo 12 de la ley 23.737 de estupefacientes.

Respecto a la utilización de celulares, Fenol dijo que "es una falta administrativa del interno, por lo que hemos dado aviso a las fiscalías, juzgados y cámaras".

"Ya en 2006 hubo un planteo del fiscal Hidalgo para que se restrinja el uso de celulares en las cárceles. ¿Cómo puede ser que no se bloqueen las señales?", se preguntó Fenol.

Por su parte, Bouvier afirmó que habitualmente "la droga ingresa a la cárcel por la visita", pero no descartó complicidades del personal penitenciario. "Tampoco somos ingenuos, puede entrar por la posible comisión de un hecho ilícito de algún personal desleal o no. Eso lo investiga el Tribunal de Conducta".

Bouvier dijo que por mes ingresan unas 35 mil personas como visitas a las cárceles de toda la provincia.

Fuente: lavoz.com