Los activistas argentinos de Greenpeace ,Camila Speziale y Hernán Perez Orsi , que fueron detenidos en Rusia por intentar subirse a la plataforma petrolera de la empresa Gazprom, regresaron esta mañana a la Argentina.

Speziale, de 21 años, y Pérez Orsi, de 40, partieron en un avión desde el aeropuerto internacional Púlkovo de San Petersburgo tres días después debeneficiarse de una amnistía general declarada con ocasión de los 20 años de la Constitución rusa.

Arribaron al aeropuerto de Ezeiza a las 9:13 en el vuelo 394 de Air France, que abordaron en París, y eran aguardados por los familiares y activistas de Greenpeace con remeras verdes y blancas.

"Esta experiencia reafirma mis valores. Fueron muchos los momentos difíciles. Uno pasa angustia, miedo, incertidumbre. Nos utilizaron de chivo expiatorio", explicó Pérez Orsi a su llegada al país.

"Uno saca fortaleza frente a esta situación con el amor de la gente, los amigos y la familia", agregó el activista, que aseguró que "la embajada argentina estuvo todo el tiempo hasta el último día" con ellos. "Inclusive el cónsul argentino nos ayudó en el aeropuerto con los trámites del viaje", aclaró.

UNA INJUSTICIA

En tanto, su compañera Speziale precisó que "fueron tres meses muy difíciles". "Esto no tendría que haber pasado. Fue una injusticia. Lo único que queríamos era proteger el planeta", indicó la activista a su llegada a Ezeiza.

"Creo que el gobierno ruso nos debe una disculpa a todos por la acción que realizaron. Voy a seguir luchando por mis ideales. Lo peor que nos pasa es el daño psicológico que nos realizaron. El aislamiento es lo peor que le pueden hacer a una persona", recalcó Speziale, que dijo no arrepentirse de haber realizado la acción por la que fue detenida.

Speziale y Pérez Orsi, junto a otros 28 tripulantes del rompehielos "Arctic Sunrise" de Greenpeace,fueron detenidos el 19 de septiembre pasado cuando intentaban escalar la plataforma petrolera"Prirazlomnaya" del gigante gasístico Gazprom, en aguas del Ártico, con el fin de detener una perforación.

"Estoy totalmente indignada por la perforación que comenzó a realizar la empresa Gazprom hace una semana. Hay que defender el planeta para las futuras generaciones", concluyó la activista, antes de volver a reencontrarse con sus familiares.