La pericia realizada por forenses halló 22 manchas hemáticas en la camioneta de César Sena, que habría sido utilizada para trasladar el cuerpo de su pareja, Cecilia Strzyzowski, quien está desaparecida desde hace un mes y medio.

Por su parte, los fiscales determinaron que esa camioneta ingresó a la cochera de la vivienda, donde se vio entrar a la joven el 2 de junio; y que se ocultó el cuerpo en la cajuela hasta que lo llevó al campo de su familia, donde horas más tarde lo incineró.

También se encontraron muestras en el auto que acompañó a César esa noche y que conducía Gustavo Obregón, un empleado de la familia Sena.

Las muestras fueron levantadas a partir del uso de luminol, tal cual lo habían solicitado los fiscales del equipo especial.

Los hallazgos coinciden con la declaración de Obregón quien, como arrepentido, dijo que contribuyó a encubrir el crimen, y que fue en la camioneta de César que se llevó el cuerpo y que él lo secundó en su vehículo hacia Campo Rossi.

Con nuevos estudios, ahora se determinará si esa sangre es o no humana y si la misma corresponde a la de la joven de 29 años.

Este viernes los peritos también confirmaron que la sangre hallada en la casa de los Sena pertenece a Cecilia Stryzowski. Se trata de rastros encontrados en un colchón, un mueble y el piso de uno de los cuartos de la casa de la familia de los Sena donde estuvo Cecilia, allí se la vio entrar pero nunca salir.