Facundo Manzoni fue candidato a intendente de Viamonte por el espacio Juntos por el Cambio y el 25 de junio pasado obtuvo más del 50% de los votos de los habitantes que lo depositaron al frente del municipio que pertenece al departamento de Unión. El triunfo fue por una diferencia contundente, con un 54% del 32%. En tanto, la media electoral a nivel provincial fue del 68% y en Viamonte votó el 82% del padrón electoral.

Tras el triunfo, el festejo de Manzoni se volvió viral, ya que salió en un sulky a recorrer las calles de la localidad para saludar y celebrar la victoria. 

En Gente Necesaria narró el motivo por el cual decidió involucrarse en la política. “Haciendo un trabajo comparativo de lo que era mi pueblo hace 20 años con lo que es ahora, el mismo se va apagando y se está transformando en una sociedad vieja porque los jóvenes se van en búsqueda de condiciones de desarrollo”, dijo.

Por esto, señaló que se animó a participar, involucró y comprometió, tal como lo hicieron varios vecinos que no vienen de la política. “Hicimos esto por amor a nuestro pueblo, al cual lo vemos como nuestra casa, nuestra familia”, sostuvo.

Respecto a su postulación, dijo que la decidió cuando el ex intendente que no podía ser reelecto postuló a su primo, una persona que hace 25 años no vive en el pueblo y está radicado en Córdoba. Manifestó que le ganaron al oficialismo perteneciente al partido peronista que hacía 20 años estaba en el poder.

Aclaró que no quiere vivir de la política, cree en la alternancia y piensa estar cuatro años, “ser un animal de paso para volver al campo que es lo que le gusta”.
 
Sobre la donación de su salario como intendente, dijo que la dirigencia argentina se debe resetear. “Este fondo se usará todos los meses de manera religiosa para que a través de  proyectos y el fortalecimiento institucional, el dinero vuelva al pueblo”, sostuvo.

Por esto dijo que ve a la política como una herramienta de transformación, como el arte de lo posible y no como un aguantadero. Definió a los políticos, como los responsables de convertir a la política en miserable y corrupta.

En este marco, justificó que fue con Juez porque tuvo la elección municipal pegada a la provincial con una boleta única que consideró “caprichosa, confusa y diseñada para que gane el oficialismo”.

“La solución está en nosotros, hay que animarse y participar porque después la queja no sirve. Tenemos un país hermoso, donde el problema no es económico sino provocado por quienes lo gobiernan ya que lo vuelve impredecible, inflacionario y carente de políticas de estado y liderazgo”, afirmó.

Se refirió a la pobreza en el país. Señaló que hay más de 5 millones de argentinos bajo la línea de indigencia y más de la mitad de los niños argentinos son pobres cuando tenemos una capacidad productiva para alimentar a 400.000.000 de personas.

Por último, mencionó la deserción escolar, las falencias en la salud pública y las escasas posibilidades laborales que ofrece la localidad como algunos de los motivos que genera el desarraigo de los jóvenes de sus pueblos. “Tengo que brindar las condiciones para que los jóvenes retornen y se desarrollen acá”, concluyó.