Pilar Mari es una ceramista argentina que vive en el Pueblo de Payogasta, Valle Calchaqui salteño. Su casa se encuentra dentro del Parque Nacional Los Cardones.

Realiza el proceso completo de la cerámica donde hace sus propias pastas, esmaltes, engobes y pigmentos. Hornea en dos tipos de horno: uno construido por ella y otro en horno eléctrico. Además investiga sobre esmaltes y procesos en las horneadas, logrando piezas únicas. 

Vivió en varias regiones de Argentina y Paris, experiencias que le dieron un conocimiento de las diferentes culturas y tradiciones reflejadas en su obra como así también la naturaleza donde vive en la actualidad.

“Me interesaba estar en contacto con esta tierra porque tiene las raíces de la cerámica arqueológica argentina. Siempre fue algo que admire”, dijo en diálogo con La Vuelta del Perro.

Sobre el proceso de moldear el barro, explicó que la porcelana es un tipo de cerámica de muy alta temperatura horneada a 1300 grados. Luego está la llamada cerámica de alta temperatura que se hornea en un rango de los 1100 grados. A más baja temperatura, se logra la llamada loza, horneada alrededor de los 1000 grados y también la cerámica arqueológica horneada alrededor de los 850 grados.

Aclaró que el barro es arcilla mezclada con los materiales que pasa a ser cerámica cuando se expone al fuego a más de 600 grados.
 
Por otra parte, invitó a las Jornadas Artísticas que organiza basadas en tres días de encuentro con la cerámica y la naturaleza salteña. El 17, 18 y 19 de junio será el próximo encuentro en el que aún quedan cupos.

@laserena.ceramica es el nombre del espacio de Pilar, que refleja la serenidad que le da trabajar la tierra. El taller se encuentra en la Ruta Nacional 40 en el kilómetro 4512.