Kiara Romero, envuelta en mantas, llegó en los brazos de su madre y de su abuela a la comisaría de San Nicolás, en donde se realizarán trámites referentes a la desaparición y el posterior hallazgo de la pequeña.
La menor de 18 meses estuvo desaparecida durante cuatro días, luego de que su madre la dejara al cuidado de una mujer conocida, y fue encontrada en Deán Funes, cuando viajaba junto a un hombre que pretendía llevarla a la provincia de Tucumán.

Marcelo Lemos, de 26 años, el hombre conocido como "el tucumano" y que fuera detenido tras constatarse que mantenía a la menor, dio una insólita explicación de por qué se la había llevado: "Estaba tirada, se la iba a dar a mi mamá para que la cuide porque la madre es prostituta. No quise secuestrarla. Mi mamá cuidó varios hijos y sabe cómo hacerlo", sostuvo mientras era trasladado de la comisaría.

Además, las cuestiones en la familia de Anabella, la madre de Kiara, de 15 años, comenzaron a ventilarse a los medios. El papá de Anabella, el abuelo de Kiara, pidió la tenencia de su hija hace más de 5 años, porque afirmaba que la nena no estaba contenida en el hogar materno. Los otros tres hijos de la pareja están bajo la custodia del hombre. Ahora, el padre volvió a solicitar la custodia de su hija ante la Justicia.

La bisabuela de Kiara, Mirta, se sinceró ante los medios aclarando que "todos tenemos un poco que ver con lo que pasó con la nena, no sólo la madre y la abuela. Tendríamos que haber puesto un poco más de cada uno y quizá esto no hubiera sucedido".
El fiscal descarta que el secuestro esté vinculado al tráfico de niños

"De la indagatoria a las personas detenidas (haciendo referencia a la mujer que quedó a cargo de la menor y a otros dos hombres que serían limpiavidrios) no surgió que tengan un perfil que los señale como personas proclives a integrar una banda o una asociación ilícita dedicada a la sustracción de menores para su posterior venta", indicó el fiscal a cargo de la investigación, Ariel Tempo. (Fuente:Infobae.com)