Con cerca de 800 millones de euros recaudados en todo el mundo, Wonder Woman se convirtió en una de las películas más taquilleras de 2017 y la gran esperanza de la franquicia superheroica de DC. También en un fenómeno social que hizo gala del espíritu de lucha feminista del nuevo tiempo, refrendado en los carteles de las manifestaciones por los derechos de las mujeres alrededor del globo, con su protagonista Gal Gadot como icono para toda una generación. Pero no es oro todo lo que reluce en la superproducción y la actriz Charlize Theron lo ha desvelado en un programa de televisión estadounidense. En plena promoción del largometraje Casi imposible, en el que comparte reparto con el actor Seth Rogen, la ganadora del Oscar contestó a una espectadora que le preguntaba sobre si se arrepentía de haber rechazado participar en uno de los mayores blockbusters de los últimos tiempos. Nadie esperaba, ni siquiera los ejecutivos de Warner Bros, la sinceridad de Theron en su confesión.



“Este es un gran ejemplo de cómo Hollywood te da una bofetada en la cara cuando empiezas a cumplir años. Alguien se me acercó y me dijo, ‘Oh, hay mucha acción en esta película, Wonder Woman. Queremos que seas consciente de esto’”, comentó la ganadora del Oscar por Monster, concluyendo su discurso con un episodio sintomático del sexismo que sigue rigiendo las oficinas de los estudios de la meca del cine: “Yo les contesté que no estaba muy familiarizada con el personaje… ‘¿Qué hace Wonder Woman?’ Y ahí fue cuando me contestaron: ‘No, es para hacer de madre de Wonder Woman’”. La respuesta de Theron en el formato Watch What Happens Live resulta especialmente indignante si tenemos en cuenta que el filme se rodó en 2016, cuando Theron cumplía 40 años. Para más inri, Gal Gadot, la actriz que dio vida a la superheroína e hija de su personaje, solo tiene en la vida real nueve años menos que ella. Finalmente fue Connie Nielsen (53) la que interpretó a la reina Hippolyta, tras rechazarlo también Nicole Kidman.

“No pasa nada, pero se trató de un momento definitorio que me indicó que algo había cambiado [en mi carrera], y no fui plenamente consciente”, explicó. Charlize Theron ha dado vida a algunos de los grandes papeles femeninos en películas de acción de los últimos años, como el de Imperator Furiosa en Mad Max: Furia en la carretera y el de Lorraine en Atómica, estrenada el mismo año que Wonder Woman. El multimillonario negocio empresarial de los superhéroes tiene todavía una deuda pendiente a la hora de proponer papeles a actrices situadas más allá de la veintena. Quizás sea Angelina Jolie, cuyo fichaje por Marvel parece inminente para protagonizar Los Eternos, la que acabe con este techo de cristal.

El País