Este sábado el evento URCC 77 celebrado en Manila, Filipinas, fue el escenario de un momento único en la historia de las artes marciales mixtas, consideradas uno de los deportes más violentos del planeta.

En lugar de realizar una pelea entre dos luchadores, los organizadores hicieron un 3 vs. 3 con las mismas reglas de MMA pero tres veces más agresivo. Los temerarios no fueron los únicos que se multiplicaron. Para esta ocasión, los árbitros también fueron tres.

Los peleadores tenían la libertad de golpear a cualquiera de sus oponentes, pero no podían descuidar su defensa, ya otros dos rivales podían atacarlo en cualquier momento.



El cruce en el  URCC 77 fue entre tres filipinos, con guantes rojos, y tres chinos, con guantes azules. Los locales se quedaron con la victoria por decisión de los jueces.

En las redes sociales no hay una opinión unificada de los usuarios. Mientras algunos sostienen que esta nueva modalidad es espectacular y debería ser inlcuída por compañías más populares como Bellator o UFC, otros insisten en que esto es una "deformación" del deporte, que pasa a transformarse en un "circo". "Esto puede ser incluso peor que la lucha con los nudillos desnudos. Lo que le está pasando a MMA", señaló un usuario preocupado.

Es que en abril el mundo se escandalizó al ver cómo quedaron los peleadores Artem Lobov y Jason Kgnight tras su sangrienta pelea de boxeo sin guantes. Ambos fueron protagonistas del quinto evento de 'Bare Knuckle' (BKFC), que traducido al español sería "nudillo desnudo". El ruso Lobov se llevó la victoria por puntos y tras la pelea recibió la felicitaciones de Conor McGregor, quien ya acudió a darle ánimo en el pasado cuando peleaba en la UFC.