Los testimonios de fe muestran que el mal tiempo no es inconveniente para dejar lo mejor de cada uno en función de la creencia y el amor hacia el Cristo de la Buena Muerta. Desde la Catedral partieron los peregrinos que van con la oración como bandera.
Testimonios
Ni la lluvia, ni el frío detuvieron a quienes ofrendaron sus promesas de caminar durante la noche del 30 de abril y el 1 de mayo para encontrarse con el Cristo de la Buena Muerte.
Una mujer de Canals, quien vive en la ciudad desde Río Cuarto, expresó que no importa el mal tiempo, pues la fe la moviliza y "es una experiencia muy hermosa".
Una señora de la ciudad dijo que iba a marchar con mucha fe, es la primera vez que marcha caminando a cumplir una promesa y a pedir por todos.
Otra riocuartense dijo que decidió marchar hacia el Cristo de la Buena Muerta sin promesa, como un desafío que pretende lograr.
Por su parte varios hombres comentaron ser parte de la Peregrinación hacia Reducción para cumplir promesas que le habían pedido al Cristo, muchos de ellos marchan solos, y su mayor expectativa es poder llegar, "al mal tiempo, buena cara" expresaron con alegría.