La polémica por el
remate de motos en General Deheza continúa y si faltaba la palabra de alguien, era de quien realizó el remate en dicha localidad.
Eugenio Olcese, martillero público, fue quien remató las 80 motos en General Deheza y respondió a algunos de los cuestionamientos del empresario del rubro, Mario Magnano, además de explicar minuciosamente cómo se realiza el remate.
“No pueden rematar algo que no es de ellos si no hay un juicio previo”, manifestó Magnano días atrás a Radio Río Cuarto. Por su parte Olcese aseguró que el Registro Nacional del Automotor lo permite y la ley también.
Con respecto a la deuda de los propietarios anteriores de los motovehículos, indicó que lo que ocurrirá con ella depende de la política de finanza tomada por el Municipio. “El nuevo propietario no tiene la deuda anterior”, aclaró.
Además aseguró que se viene trabajando desde el año pasado y remarcó que se le da oportunidades al deudor para que hasta una hora antes del remate pueda retirar la motocicleta. Sin embargo aclaró que en la mayoría de los casos esto no ocurre.
Citó como ejemplo de esto que sólo 10 motos fueron devueltas a sus propietarios de las 98 rematadas en General Deheza.
¿Cómo es el procedimiento?
“Los propietarios no pasan a buscar el vehículo secuestrado por distintas circunstancias”, dijo Olcese e inició la explicación del procedimiento. Aseguró que la mecánica implementada es de acuerdo a lo establecido por el Registro Nacional del Automotor.
Una vez tomada la decisión de rematar estos bienes se realizan todos los trámites correspondientes.
Primero se verifica que el número de chasis y motor sean correctos y no haya una alteración. Si se detecta una anormalidad es retirado y puesto a disposición de la policía, según el martillero público.
Luego de las verificaciones, se eleva todo a dirección nacional, la cual a través de una nota, informa al organismo subastante, en este caso al municipio, si esos vehículos fueron o no inscriptos y quien es el titular registral.
Posteriormente, con toda esta información, se notifica a todos los titulares registrales y se les dan cinco días para que en caso de regularizar las deudas puedan recuperar su vehículo, señaló Olcese. Sin embargo aclaró que en la mayoría de los casos esto no ocurre.
Para citar un ejemplo indicó: “De las 80 motos rematadas en Deheza sólo 10 fueron devueltas a sus propietarios tras regularizar la deuda”.
Una vez asignados los lotes que serán subastados se realiza un decreto y pública en los diferentes medios, aseguró.
Por último, una vez realizada la subasta a la persona que adquirió el lote, se le estrega una carpeta para que inscriba el vehículo en función de lo establecido por la Dirección Nacional del Automotor.
“Hay que concientizar a la gente que debe regularizar la documentación y los requerimientos técnicos que necesita para circular”, concluyó Olcese.