Teófilo Homeraldo Plasencia, "Don Teo" para sus conocidos, recibió el grotesco
apodo de "Doctor Muerte" en las crónicas policiales cuando fue arrestado en octubre de 2011 acusado de practicar abortos en una pieza sucia de Claypole, partido de Almirante Brown, en una casa sobre la calle 17 de octubre, no muy lejos de la estación de tren.
Plasencia no fue imputado en aquel entonces por homicidio culposo, pero
lo que la Policía Bonaerense encontró al ponerse a cavar en su jardín fue lo suficientemente grotesco como para que se lleve el apodo: restos de fetos humanos, no uno, sino varios, en la tierra del patio y también en la cañería del baño,
parcialmente disueltos por químicos.
La gran cantidad de mujeres que entraban y salían de la casa, algunas de ellas en camilla, dispararon las sospechas judiciales. En el procedimiento bajo las ordenes de la UFI N°7 de la jurisdicción se secuestró instrumental quirúrgico, gasas y anestesia, tranquilizantes y elementos de sutura. Tres mujeres de nacionalidad peruana con falsas credenciales de enfermeras fueron aprehendidas. Una serie de carteles fueron encontrados. "Partera, ginecóloga", decían.
No era la primera vez que esos carteles eran encontrados, ni era la primera vez que la Bonaerense irrumpía en la casa de "Don Teo". Un artículo del diario
La Nación de abril del 2000 detalla cómo policías, bomberos y personal de Defensa Civil ingresaron en el lugar. Esta vez, una mujer efectivamente murió, una joven de 19 años que perdió la vida tras presuntamente realizarse un aborto en el lugar.
Plasencia terminó bajo prisión preventiva, una medida dictada por la jueza Analía Puig Dengola. "Aborto seguido de muerte" fue un delito incluido en la imputación junto a calificaciones como falsedad ideológica y asociación ilícita. Las sospechas, por otra parte, no se referían solo a embarazos interrumpidos en condiciones de miseria e insalubridad, sino también a venta de bebés por fuertes sumas.
Las ordenes de la UFI N°14 de Lomas de Zamora no eran solo de allanamiento, sino también de arresto. Eran para Marcos y Gonzalo, hijo y nieto de Plasensia respectivamente. Ambos quedaron detenidos. El delito: narcotráfico, menudear cocaína. La pareja de Marcos, una mujer de 43 años, también fue aprehendida en el acto. Lo que encontraron fue la marca del viejo negocio familiar: 43 carteles pintado a mano y más de dos mil stickers. "Partera, ginecóloga", se podía leer, con un número de celular. Junto a los stickers, en una pieza con frazadas de leopardo, gasas y suero, agujas.
El hallazgo de la DDI dio pie a la sospecha de que los Plasencia estaban de vuelta en su vieja actividad, o que nunca la habrían abandonado del todo.
Por lo pronto, la Justicia cuenta con sospechas fuertes de que se practicaron abortos en tiempos recientes. Por otra parte, para la gente del barrio, los carteles que publicitaban abortos tácitamente nunca dejaron de hacerse ver.
¿Quién es “Don Teo”?
"Don Teo", nacido en enero de 1945 en Perú, era
un supuesto médico con licencia revocada. Todavía continúa registrado en la AFIP bajo la actividad en los rubros de servicios de consulta médica y atención ambulatoria. Los carteles que publicitan una partera también siguen en pie, en los postes de luz del sur del conurbano. La semana pasada, la Jefatura Departamental de Quilmes allanó un complejo sobre la avenida Monteverde al 300, en la localidad de Florencio Varela, dos propiedades unidas que mezclaban pasillos y construcciones precarias sobre los techos.
El hijo y el nieto de "Don Teo"
llegaron a la avenida Monteverde hace poco menos de dos años. El patriarca de la familia también era una figura frecuente, un hombre afable para los vecinos, que incluso saludaba: se dejaba ver en rodeado de varias mujeres jóvenes, poco más que veinteañeras, la edad suficiente para ser sus nietas. Los vecinos dejaron de verlo en 2015.
Queda una pregunta esperable. ¿Dónde está "Don Teo"? "Me parece que preso", dice un investigador asignado al caso. "Le dieron domiciliaria porque está viejito", arriesga alguien que lo conoce. Practicar un aborto con consentimiento de la paciente conlleva la pena máxima de cuatro años según el Código Penal.
Pero "Don Teo", dos veces allanado por poner en riesgo la vida de mujeres, estaría libre.
Su ficha en el Servicio Penitenciario Bonaerense marca un solo ingreso, con un lugar asignado en una celda en el Pabellón 2 del penal de Olmos. Entró a la cárcel en abril de 2012 para irse en marzo de 2013. El registro no detalla una imputación por el delito de aborto, precisamente, sino una acusación de "quebrantamiento de inhabilitación legal" bajo la firma del Juzgado en lo Correccional N°5 de Lomas de Zamora.
Fuente: Infobae