La técnica del Registro Akáshico te eleva por encima de situaciones mundanas. Hace que todo se magnifique e ilumine nítidamente. Los tibetanos consideran a la Akasha como una sustancia primordial en donde todo ha sido creado. Venimos de la Akasha y regresamos a ella una y otra vez. Se la considera una energía búdica y conectada íntimamente a Dios, todo lo que es Fuente. El Registro guarda toda la información de todas las transformaciones y experiencias de vida que ha elegido, para su evolución y aprendizaje, desde lo eterno y lo físico, esta esencia energética que todos y todas las cosas poseen.
Cada apertura de registro genera cambios, por ende, limpieza del karma. La rueda de las experiencias comienza a girar y nosotros en ese devenir fluimos ante la sanación específica que nos ofrece lo Akáshico. Así como también revisar patrones inconcientes o concientes que repetimos de generación en generación. La técnica nos da la oportunidad de reconstruir otro tipo de paradigma interno.
Todos podemos tener acceso al Registro Akáshico, solo que para hacerlo correctamente debemos aprender la técnica y tener la iniciación apropiada. Al trabajar desde la técnica del Registro Akáshico nos contactamos con seres ascendidos, guías y maestros espirituales que nos acercan y nos ayudan a tener la información que se requiere. Si es necesario conectaremos con vidas pasadas, presente o futuro. 
Todo esto, sí y solo sí, tu alma lo requiere para su efectivo progreso espiritual.