El prelado alemán que destinó 31 millones a su sede arzobispal trabajará en la Santa Sede
El ex obispo de Limburgo Franz-Peter Tebartz-van Elst, que pasó a la fama por el escándalo provocado por sus gastos exorbitantes en la remodelación de la sede de su arzobispado en Alemania, trabajará el mes próximo en el Vaticano.
Según versiones difundidas en la prensa alemana y confirmadas ayer por el Vaticano, el denominado "obispo del lujo" pasará a ser "delegado de la catequesis" del Pontificio Consejo para la Nueva Evangelización, que preside el arzobispo Rino Fisichella. Se trata de un cargo que no existía anteriormente en esta estructura, lo cual, según entendidos, significa que Francisco no quiso trasladarlo a ninguna diócesis de su país, donde nadie lo quiere.
Cuando, en marzo pasado, el Papa aceptó su renuncia, un comunicado de la Santa Sede había indicado que monseñor Tebartz-van Elst iba recibir "en tiempo oportuno" otro encargo.
De hecho, mientras el ex arzobispo de Buenos Aires habla de una "Iglesia pobre para los pobres", Tebartz-van Elst había causado indignación y escándalo en Alemania al gastar 31 millones de euros para remodelar su residencia.
AMENAZA
Según el ex director de las fuerzas policiales de Filipinas Getulio Napenas, un grupo vinculado a la red Al-Qaeda había proyectado hacer estallar una bomba durante la visita del Papa al país, en enero; sin embargo, el gobierno desmintió luego la versión.