La joven tenía 24 años y estaba encargada de alimentar a los felinos. Murió por las heridas que le produjo uno de ellos.
Una joven que se desempeñaba como cuidadora de un zoológico en el área de Cumbria, Reino Unido, murió el viernes pasado a causa de las heridas que le produjo uno de los tigres que intentaba alimentar.
Sarah McClay, de 24 años, murió alrededor de las 4 de la tarde del viernes pasado después de haber sido atacada por uno de los tigres del South Lakes Wild Animal Park de Cumbria, informó el sitio inglés Daily Mail. La joven recibió auxilio médico, pero murió en la ambulancia de camino al hospital debido a heridas profundas en el cuello y la cabeza.
El dueño del zoológico, David Gill, aseguró que la joven había transgredido las normas de seguridad dispuestas para proteger a los cuidadores cuando ingresaban al recinto de los tigres. "No se dan una idea de lo desesperados que estamos por la pérdida de nuestra querdia compañera", expresó el hombre.
McClay ingresó al recinto de los felinos sin tener en cuenta que debía mantenerse separada de ellos por medio de unas compuertas instaladas en la fosa. "Por alguna extraña razón, inexplicable, porque no hay motivo por el que lo hizo, ella abrió la puerta y entró al hábitat y fue directo a los tigres, y ahora nunca sabremos por qué", expresó el dueño del zoo.