La liga de Malasia todavía no arrancó pero, en cada amistoso que juega con el Johor Darul Takzim, Pablo Aimar es idolatrado por los hinchas que, como muchos alrededor del mundo, no entienden como el Payasito está allí. La prueba está en el video que lo muestra llegar a la cancha en una camioneta negra: un segundo después de asomar la cabeza, la gente empieza a gritar como si vinieran los Beatles y entonan un “Aimar, Aimar” con acento asiático.

Un rato más tarde, con la 10 en la espalda Pablito la gastó en el triunfo de su equipo 3-0 contra el Hougang United. Lucho Figueroa, compañero de equipo, no fue de la partida pero al Payaso le alcanzó con desplegar un poco de su magia para pasar por arriba a rivales endebles. Descartada su llegada al América de México, el enganche llega con todo al arranque de la competencia oficial malaya. (Olé)