El pasado sábado, 48 intendentes y jefes comunales de Córdoba, encabezados por Graciela Sánchez, repudiaron enérgicamente las declaraciones del presidente, que consideraron un ataque a los derechos de las mujeres y de la comunidad LGBTIQ. Durante una entrevista, Sánchez, que ha trabajado en diversas organizaciones no gubernamentales y en la prevención de violencia de género, expresó su preocupación por las repercusiones de los dichos presidenciales.
"Es un retroceso de 100 años de lucha de muchas mujeres. Falta el respeto al recuerdo de figuras como Alicia Moró y Cecilia Grierson, que dieron todo su esfuerzo para que hoy tengamos estos derechos que estamos disfrutando", dijo Sánchez. Para ella, la declaración del presidente no solo fue un golpe a los avances en igualdad de género, sino también una negación de los logros históricos alcanzados en Argentina.
La intendenta resaltó que en su comunidad, y en muchas otras, se ha trabajado intensamente en la prevención de la violencia y en la inclusión de la comunidad LGBTIQ. "Por ejemplo, en Villa María, que está a solo 30 kilómetros de aquí, han contado con un consultorio inclusivo donde se les brindaba contención y asistencia social, médica y psicológica. Hoy, lamentablemente, eso ya no es reconocido", comentó, visibilizando la fragilidad de estos avances frente a los discursos de retroceso.
Sánchez también enfatizó la necesidad de seguir luchando por la cultura de la igualdad y la no discriminación. "Esto no tiene que ver con lo económico, es una cuestión cultural", afirmó. Según ella, el desafío más grande radica en combatir las ideas que perpetúan una cultura patriarcal que limita los derechos y la dignidad de las personas. En ese sentido, hizo un llamado a tomar conciencia y a continuar avanzando en la lucha por los derechos de todos los géneros, sin excluir a ninguna identidad.
Por último, la intendenta concluyó su intervención recordando que la batalla por los derechos de las mujeres y las comunidades históricamente marginadas es una responsabilidad colectiva. "Espero que la marcha y el reclamo de derechos continúen, que este sea un punto de partida para que sigamos avanzando, porque no podemos dar un paso atrás", concluyó Graciela Sánchez, quien, como muchas de sus colegas, se comprometió a seguir defendiendo la inclusión y la igualdad.