El obispo Uriona dio un mensaje de paz en un mundo en guerra en el marco de la celebración de la virgen de la Consolata en Sampacho.
 
El obispo Adolfo Uriona encabezó una multitudinaria ceremonia y dijo que es necesario el consuelo y la paz en una sociedad con tantos signos de violencia.
 
“Hoy como nunca todos y este mundo necesita el consuelo, la paz y la alegría. La paz en un mundo que está en guerra, pero no solamente en las guerras terribles que ocurren en distintas partes y en Ucrania de manera particular, sino también en la perdida de la paz que tenemos en nuestra sociedad con tantos signos de violencia, en la perdida de la paz en nuestras familias donde hay tenciones y muchas veces rupturas, en la perdida de la paz en las comunidades muchas veces contrapuestas y muchas veces en la perdida de la paz en nosotros mismos, tenemos desasosiego e inquietudes” expresó el obispo
 
Finalizó “no tenemos paz, necesitamos que María del Consuelo nos regale la paz como lo hizo con su prima Isabel, van unidas la paz y la alegría, van unidas, tenemos un mundo que nos hace una oferta maravillosa de mil maneras de diversiones y pasarla bien, es un mundo triste le falta la auténtica alegría”