Fue una "sorpresa de octubre" a tono con 2020. Cuando falta poco más de un mes para las elecciones presidenciales en Estados Unidos, el presidente del país, Donald Trump, dio positivo por coronavirus, un giro dramático que sacudió la campaña, alteró a la Casa Blanca y conmocionó al mundo. Por "precaución", Trump fue traslado en el helicóptero Marine One a un hospital militar.

La enfermedad de Trump, quien comenzó un tratamiento para reforzar su sistema inmune con un cóctel experimental de anticuerpos, vitaminas y zinc y hasta el jueves estaba "fatigado, pero con buen espíritu", según su médico, forzó a todo el arco político a improvisar un recálculo en la recta final hacia una elección que tanto republicanos como demócratas han enmarcado como la más crucial en la historia de Estados Unidos.

Los médicos de Trump decidieron llevarlo al hospital militar Walter Reed durante la tarde de este viernes por precaución. "El presidente Trump permanece de buen humor, tiene síntomas leves y ha estado trabajando durante todo el día. Por precaución, y por recomendación de su médico y expertos médicos, el presidente trabajará desde las oficinas presidenciales de Walter Reed durante los próximos días", informó la vocera presidencial, Kayleigh McEnany.