Hugo Lucero, peón del hipódromo, habló con Acción Deportiva sobre cómo está llevando la cuarentena y su tarea en el día a día: "Aquí se trabaja desde muy temprano, prácticamente no hay vacaciones. Llueva, haga frío o calor uno debe estar con los caballos. Hay que aguantar esta situación, gracias a Dios la gente nos ayudó todo este tiempo. Este parate no le vino bien a nadie".

Una parte importante de los sueldos de los jockeys son por sus desempeños en las carreras. Jorge Gómez expresó el difícil momento que pasaron durante estos meses sin actividad: "Esto es un trabajo de todos los días. Esta Pandemia no nos dejó correr, nosotros vivimos de eso. Para poder subsistir, debemos agradecerle a los dueños de los caballos que nos han ayudado todos estos meses sin competir".

Rodrigo Congestre, veterinario relató las modificaciones que debieron hacerse con respecto a la salud de los principales protagonistas del hipódromo: "Solo se paró durante tres o cuatro días, cuando comenzó la pandemia. Luego hicieron entrenamientos livianos porque estos animales son deportistas y demandan. Solo se cambió la alimentación en una pequeña porción ya que no tenían competencia".

Ivan Grillo, responsable de la organización de las carreras en el Jockey Club, explicó que se presentó un protocolo al COE regional y central para volver a competir: "Representan el 80% de nuestros ingresos, al no tenerlas se complica para pagarle a los 70 empleados que tiene el club. Estamos a la espera de la habilitación para que se pueda volver a correr con todas las precauciones posibles. De esta actividad viven 400 familias".