Se suspendieron todas las actividades relacionadas a las misas diarias y dominicales, dispensando a los fieles de la obligación del cumplimiento del precepto dominical.
Monseñor Adolfo Uriona, Obispo Diocesano, comunicó a la comunidad que, por la emergencia sanitaria, se suspenderán todas las misas con concurrencia de fieles, incluidas las de los fines de semana. El pasado sábado 14 de marzo ha dispensado a todos los fieles de la obligación del cumplimiento del precepto dominical.
Al mismo tiempo recuerda la doctrina tradicional: ante la imposibilidad de participar de la santa Misa dominical, se debe santificar el domingo de otros modos, por ejemplo permaneciendo en oración durante un tiempo conveniente, solos o en familia, siguiendo la celebración de la misa a través de los medios de comunicación y las redes sociales, etc.
El Obispo informó también que se han suspendido todas las actividades pastorales y parroquiales para evitar la aglomeración y desplazamiento de personas.
Pidió e a todos los cristianos intensificar la oración rogando al Señor detenga con su mano la epidemia y estar atentos a las personas más vulnerables (ancianos, enfermos, pobres).