Antes del traspaso de mando, el presidente electo, Alberto Fernández destacó que "el riesgo de default es muy alto" y responsabilizó al gobierno de Mauricio Macri por la situación económica. También pidió "respetar la convivencia democrática" y opinó: "No puede ser que la alternancia se convierta en un momento de crisis para los argentinos".
"El mercado nacional está impedido de pagar y el riesgo de default es muy alto. De hecho, Macri lo ha declarado. Creo que es toda su responsabilidad. Más allá de que lo acepte o no, a nadie le cabe duda sobre su responsabilidad por el tema de la deuda", sostuvo Fernández en diálogo con el programa "Va de vuelta", que emite Radio Nacional.
"La Argentina tiene que tomar estos cambios con naturalidad", sostuvo el futuro mandatario sobre el
acto que compartió el sábado con el presidente saliente, Mauricio Macri, en Luján. "Llevamos 36 años de democracia. No puede ser que la alternancia se convierta en un momento de crisis para los argentinos", agregó.
"Está claro que Macri y yo tenemos concepciones distintas, pero tenemos que entender que el secreto de la convivencia democrática es respetarse, no tolerarse", añadió. "Tenemos que poder pensar distinto".
A los periodistas
En la misma entrevista el presidente electo fue consultado sobre el cuestionado mensaje que envió a través de Twitter al periodista de Hugo Alconada Mon: "Que me perdonen los periodistas, pero cada vez que me atribuyan un delito, voy a reaccionar, porque yo no delinco", lanzó.
La semana pasada, Fernández atacó a los medios de comunicación al rechazar una nota de Alconada Mon, quien reveló que un colaborador del ex jefe de Gabinete aparece en el caso de facturas truchas que involucra al empresario kirchnerista Lázaro Báez.
"No voy a dejar que nadie maltrate mi buen nombre y honor, porque no doy razones para que lo hagan. Los periodistas no tienen un bill de indemnidad para cargar tintas y ensuciar a la gente gratuitamente", dijo Fernández este lunes.
"No voy a quedarme callado, cualquiera sea el periodista", siguió.
"¿No creés que hay una asimetría de poder importante?", le consultó la conductora del ciclo, Romina Manguel. "Yo seré presidente, pero soy un ciudadano que cuida su buen nombre y honor. Punto", respondió. E insistió: "No le cabe derecho a nadie hacer eso. Pueden criticarme. Lo que no pueden hacer, es atribuirme cosas que no hago. Eso está mal", dijo.
Y afirmó que seguirá dirigiéndose a periodistas a través de sus redes: "¿Si me escriben por Twitter, por qué no puedo contestar por Twitter?", expresó.
Fuente: La Nación
Foto portada: Reuters