Gracias a la omnipresencia de los móviles, las fotografías se han convertido en una peculiar y eficaz forma de viajar en el tiempo y recordar situaciones anteriores; ¿dónde estaba uno en un día en concreto hace cinco años? ¿Qué tiempo hacía en ese momento? Una imagen vale más que mil palabras y la simple contemplación de una foto tomada en esos momentos es más que suficiente para revivir los recuerdos. 

Con sus sofisticados sistemas de aprendizaje automático, Google ha detectado un atípico e inesperado (o tal vez no) patrón de uso de su popular aplicación de almacenamiento de fotos, Google Fotos: viajar en el tiempo para recordar instantáneas de uno o varios años atrás. En este sentido, el gigante ha anunciado una nueva función que sin duda encantará a los más nostálgicos y quienes hagan un uso extensivo de esta app: la función Recuerdos (Memories).

Aprendizaje automático para viajar en el tiempo

Los usuarios de la aplicación Google Fotos irán viendo paulatinamente en sus móviles en la parte superior unos círculos muy similares a las ‘historias’ de Instagram: pulsando sobre ellos, el sistema nos llevará a una selección de fotografías que fueron tomadas ese mismo día pero hace uno o varios años ¿Con qué fin? Por un lado y principalmente, para servir como forma de recordar tiempos pasados, y en segundo lugar, para permitir a quienes lo deseen compartir ese momento a los contactos o redes sociales que desee.

Desde Google recuerdan que este sistema ha sido tamizado por la inteligencia artificial, que mediante el aprendizaje automático, se eliminan de forma automática aquellas fotografías borrosas, duplicadas o incluso capturas de pantalla que no aporten realmente nada en un recuerdo. Lo segundo que hay que tener en cuenta es que estos recuerdos son inicialmente privados y en el móvil de su propietario que, posteriormente, puede desear compartirlos con sus allegados o incluso en las redes sociales que elija.

Si ese recuerdo en concreto es merecedor de ser compartido con allegados o familiares, el usuario podrá hacerlo internamente dentro de la propia plataforma de manera que pueda establecerse luego un intercambio de mensajes con ese destinatario; adicionalmente, se podrá, además, compartirlo en redes sociales y trasladarlo también a las propias historias de Instagram, Facebook o cualquier otra red.

Con todo, los sistemas de aprendizaje automático no son sino máquinas sin sentimientos ni empatía humana y pueden recuerdos que puedan herir al usuario, como de familiares fallecidos, accidentes o enfermedades pasadas, o incluso de ex parejas, una circunstancia que ha tenido en cuenta Google permitiendo que el usuario pueda filtrar previamente este contenido censurando ciertas personas o periodos de tiempo.

Esta nueva función está ya disponible pero su distribución será paulatina entre las diferentes plataformas y móviles, con lo que únicamente se sabrá si se puede disfrutar de ella una vez aparezca en la parte superior de la aplicación.

El País