Storani y Azocar fueron dos estudiantes riocuartenses que, en 1969, se rebelaron y lucharon contra la dictadura de Juan Carlos Onganía autodenominada "Revolución Argentina". Escuchá la nota.
El Cordobazo fue una insurrección popular sucedida en la ciudad argentina de Córdoba, el 29 y 30 de mayo de 1969.
Fue liderada por Elpidio Torres y Atilio López, secretarios generales respectivamente de los sindicatos SMATA (mecánicos) y Unión Tranviarios Automotor, pertenecientes a la Confederación General del Trabajo (CGT), y Agustín Tosco del sindicato de Luz y Fuerza de la CGT de los Argentinos.
Formó parte de una serie de puebladas en Argentina entre 1969 y 1972 -todas ellas nombradas con palabras terminadas con el sufijo "azo"-, contra la dictadura gobernante autodenominada "Revolución Argentina".
Las puebladas de 1969 y comienzos de 1970 debilitaron al gobierno militar y fueron uno de los factores que llevaron al reemplazo del dictador Juan Carlos Onganía en junio de 1970, abriendo paso a una salida electoral que terminó concretándose con las elecciones de 1973.
Este año se cumplen 50 años del Cordobazo, hecho histórico para el país. Dos reconocidos dirigentes políticos riocuartenses que en aquel momento participaron de las luchas estudiantiles fueron los abogados Conrado Storani y Juan Carlos Azocar.
Recordaron ese histórico suceso al destacar la valentía de un pueblo de plantarse ante una dictadura con todo el riesgo que implicaba. Coincidieron en que fue una clara muestra de lo que es capaz de hacer un pueblo unido.
“Constituimos una agrupación estudiantil de orientación nacional y popular. Se produjo una etapa de proscripción política, el sujeto político se podía observar en los movimientos estudiantiles o los sindicatos”, explicó el Dr. Azocar.
Además, Storani contó: “Había un organismo que se llamaba la 'Mesa coordinadora de agrupaciones estudiantiles', ahí estábamos todos. En el ámbito sindical había un trípode conformado por Torres, López y Tosco que era el que ofrecía su sindicato para todos los estudiantes”.
“En ese entonces había una dictadura militar. En un gobierno democrático se puede expresar, manifestarse. En aquella época no podías expresarte porque te mataban. Si hay un mensaje para transmitir, es que no sirven para nada la división del pueblo. Es difícil un acuerdo. Pero de las más diversas ideologías, es posible hermanarse en la lucha”, dijo Storani.